Morena y Delfina Gómez avanzan en su estructura territorial en el Estado de México, mientras la oposición sigue en enredos y se tomará dos semanas más para definir cómo elegirán a su eventual candidatura común que los ayude a que la cuarta transformación no se apodere de la entidad.
MILENIO confirmó que el pasado viernes las dirigencias estatales del PRI, PAN y PRD se reunieron para avanzar en acuerdos y lograr una alianza en la renovación de la gubernatura mexiquense, que les permita presentar a la persona que enfrentará a la maestra de Texcoco. Pero el único acuerdo fue seguir pensándolo.
Por encima de la ruptura de la alianza Va por México a nivel nacional, a nivel local enfrentan sus propias resistencias y, a la vez, la esperanza de poder llegar a un acuerdo para no perder la contienda más grande e importante del país.
El PAN y el PRD siguen a la espera de que el PRI cumpla con el acuerdo de presentar a su mejor perfil para medir fuerzas y, como lo dio a conocer este medio, decidir en diciembre quién abanderará a las tres fuerzas políticas. Pero el priismo se resiste a ceder ese espacio en su bastión más importante.
Por el contrario, Delfina Gómez, virtual candidata a la gubernatura del Estado de México por Morena, tiene su juego garantizado. No tiene nada qué pelear, no tiene competencia al interior, su partido no tiene dudas ni vive conflictos internos y, sobre todo, sus aliados le son leales porque solos tendrían todo qué perder. La que será candidata por segunda ocasión en la contienda mexiquense sólo espera que definan quién será su rival.
El representante de Morena en el ámbito electoral, el diputado Mario Llergo, sostuvo que están trabajando sin que los distraigan los problemas de la ahora extinta coalición Va por México, pues, a diferencia del PRI, PAN y PRD, la unión con sus aliados sí es sólida.
“Morena está haciendo su trabajo, hay disposición de nuestros aliados para continuar con este frente sólido, con esta coalición que lleva Morena a la cabeza y con el Partido Verde Ecologista y el Partido del Trabajo. Nosotros estamos orientados en nuestros objetivos, en nuestra organización, en nuestro trabajo, y así se reflejará el día de la elección; lo que hagan los de enfrente es problema de ellos”.
Los morenistas tendrán este fin de semana su Congreso Nacional con el que concluirá la renovación de sus órganos internos, lo que permitirá consolidar los trabajos para las elecciones del 2023 en el Estado de México y Coahuila, y la renovación presidencial en 2024.
En el caso del Estado de México, se nombró a una nueva dirigencia que tendrá la labor de desplegar el trabajo territorial que caracteriza a Morena y que, por tratarse de la entidad más grande del país, exigirá mayores esfuerzos de los que hayan realizado en las últimas elecciones desde que son gobierno.
“Morena es un partido en movimiento, no es un partido de escritorio sino de territorio, estamos consolidando este trabajo de base que nos ha distinguido y significado, acompañar las tareas del partido y una vez que haya candidatos acompañar los esfuerzos. El partido está organizado y puesto para enfrentar esos procesos electorales en los que Morena se alzará con el triunfo”, insistió Llergo.
El PRI espera a finales de septiembre anunciar a su propio perfil o haber logrado ya un acuerdo con el PAN y el PRD para presentar una candidatura común frente a la batalla de priistas y panistas por quedarse a la cabeza de una eventual coalición.
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La decisión no será sencilla, pues el triunfo de Alfredo del Mazo en el 2017 se logró con apenas 169 mil votos de diferencia con Delfina Gómez, quien se quedó en segundo lugar, antes de que Morena lograra llegar al gobierno federal en 2018 y la figura del presidente Andrés Manuel López Obrador ayudara a su partido a arrasar en las elecciones de la mayoría de las entidades.
Por lo que las dirigencias locales buscan apegarse a las encuestas y que el perfil más competitivo sea el que finalmente se enfrente a Delfina Gómez. Aunque las semanas pasen y Morena avance sin que del otro lado logren llegar a un acuerdo.
EHR