"El legislativo ya les falló a las mujeres; el ejecutivo y judicial no pueden seguir fallando"

SEGUNDA PARTE

Bertha Miranda, defensora de los derechos reproductivos de las mujeres, cuenta para MILENIO el antes y el después de los pañuelos verdes en Hidalgo

Bertha Miranda, defensora de los derechos reproductivos de las mujeres. (Jorge Sánchez)
Bertha Miranda Rodríguez, coordinadora estatal de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos Hidalgo. (Melisa Agüero)
Melisa Agüero
Pachuca /

La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) del 2016 señala que 48 mil 051 adolescentes encuestados en México señalaron que su primera relación sexual –tanto quienes la tuvieron durante la infancia como quienes lo hicieron en la adolescencia– no fue consentida.

En Hidalgo, según la Estadística de Natalidad del INEGI publicada en 2017, del 50 por ciento de partos en niñas entre 10 y 14 años de edad reportaron que los padres de sus hijos oscilaban entre los 18 y 41 años. De estos 82 casos hidalguenses, solo el 3 por ciento dijo que su pareja era menor de 15 años, es decir, solo tres casos fueron relaciones sexuales “entre pares”.


¿Qué pasó con la iniciativa ILE en Hidalgo?

Bertha, defensora de los derechos reproductivos de las mujeres, no ha logrado comprender por qué el Estado “laico” terminó por obligar –por acuerdos políticos– a niñas hidalguenses a tener hijos producto de una violación. “Las siguen condenando a vivir otra legislatura dentro de la clandestinidad”, pues mientras los diputados discutían en el pleno si “darles permiso” o no de abortar, su asociación seguía recibiendo a mujeres violentadas que no tenían otra opción más que huir a la Ciudad de México para acceder a un servicio legal que es un derecho reconocido tanto por la Organización de Naciones Unidas (ONU), así como en la Constitución mexicana: el derecho a decidir.


Si la maternidad no es por convicción ¿cómo se generarán sociedades más sanas y una cultura de paz? “Las niñas no lo ven como un bebé, te dicen ‘sáquenme esto’”, aunque termine siendo de manera clandestina o insalubre, porque convivir con ese producto es convivir con su perpetrador y su violencia por el resto de su vida, aun cuando él esté ausente.

“El tema de la votación (por la ILE en el Congreso de Hidalgo) que se convierte en coraje, en tristeza, porque jamás van a sentir y van a saber lo que se vive acompañando a mujeres en esa situación (…) es enojo, rabia, tristeza, frustración ver cómo de repente ciertos grupos empezaron a lucrar con el tema, fue muy decepcionante, pero también hubo algo muy satisfactorio, para mí me llenó de alegría ver a Pachuca alzada en el tema, hay un antes y un después de los pañuelos verdes (…) se nos vino el 8 de marzo aquí en Pachuca y de verdad era sorprendente ver más de 200 chicas: mamás, señoras y todo caminando por Pachuca, eso fue satisfactorio, independientemente de lo que hicieron los diputados, las diputadas, que nos causó todos esos sentimientos negativos”.


El detrás de la iniciativa ILE

¿Cómo fue tu 2019 como feminista?

“Es una mezcla de emociones, primero iniciando 2019, ver un panorama donde teníamos posibilidades de avanzar, porque justo en 2018 fue cuando nosotros tuvimos la iniciativa, comenzamos a trabajarla; en 2019 empezamos espacios de sensibilización para las diputadas y los diputados, los cabildeos, tocamos puertas y en ese momento se vuelve algo esperanzador porque finalmente Morena, quien propone, mencionaba siempre la unidad, porque siempre se mencionó que iban a votar en bloque y entonces eso te daba una esperanza (…) con el avance de los meses y descubrir algunas posturas de diputadas y diputados empezó a tornarse difícil, y al final de cuentas sí da coraje porque Morena se había comprometido; posteriormente viene la etapa del enojo por no haber hecho lo que les tocaba”.
“Esto venía acompañado con los casos. Mientras ellas, ellos, discutían en el Congreso qué negociaba, qué no, a nosotras nos siguen llegando casos de niñas violadas que no podían tener acceso a la interrupción voluntaria en Hidalgo porque recordemos que aquí está una barrera donde si la niña denuncia después de saberse embarazada, ya no tienen acceso por el código penal, pero tampoco por la Ley General de Víctimas y la NOM 046 porque ésta se sujeta al tema de la temporalidad y en Hidalgo tenemos 90 días, entonces las niñas que nos llegaban embarazadas producto de una violación, pero que además rebasaban estos 90 días no podían acceder”.

La organización Ipas México ha hecho hincapié en que “un gran número de embarazos en niñas entre 10 y 14 años no son resultado de decisiones o ‘actos deliberados’ sino de situaciones en las que las mujeres no tienen la posibilidad de negarse a la relación sexual, provocando una grave violación a sus derechos humanos”. El Código Penal del estado de Hidalgo reconoce que la edad mínima a partir de la cual una persona tiene la capacidad de consentir una relación sexual es de 15 años, es decir que mantener relaciones sexuales con una persona menor a esta edad es igual a una violación.


¿Cuál es la relación ahora con los legisladores?

“Les quedó corto, no entendieron de lo que trata este tema”
“Ellos no están ahí para complacer a nadie, ellos están ahí para ser garantes de derechos. Están en completo desconocimiento de lo que implica el estado laico, en un estado de derecho.


Yo ahora rescato a la diputada Susana (Ángeles) que en todo momento estuvo ahí buscando, negociando, haciendo estrategia; la diputada Tatiana (Ángeles), que para mí son diputadas que se rescatan del tema de Morena. Con Víctor (Osmind Guerrero), de manera personal, sí cuestiono porque no era el momento de jalar en esa situación, no había las condiciones, pudimos haber esperado un momento más idóneo y que no se quemara en ese momento la iniciativa. Quiero rescatar lo que hacen la diputada María Luisa (Pérez Perusquía) y la diputada Mayka (Ortega) del PRI, que creo que es muy rescatable que se hayan levantado a votar por el tema de los derechos de las mujeres, no lo esperábamos sinceramente, y eso es alentador porque sí hay mujeres en nuestro congreso que sí están comprometidas con los derechos. Rescato aliadas dentro del Congreso, pero los demás que solo llegaron en un momento de oportunismo, que se colaron, y que no tienen el más mínimo compromiso para avanzar en una agenda legislativa pro derechos, ¡jugaron con la vida y la libertad de las mujeres!".

Diversas organizaciones, con estadísticas en mano, han manifestado que la criminalización del aborto no ha reducido su incidencia, y en el caso de Hidalgo, la atención de abortos ha ido en aumento.

“El legislativo ya les falló a las mujeres, el poder ejecutivo y el judicial no les pueden seguir fallando”.


¿Qué mensaje queda para las compañeras activistas?

“Las activistas tenemos que aprender a decir no”

"Muchas compañeras no estamos escuchando nuestro cuerpo y es importante, es importante ir a revisiones médicas, hay que poner tiempos también, y hay que aprender a decir no, la activistas tenemos que aprender a decir que no y marcar límites por un tema de autocuidado y de salud personal".

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