El municipio de Pluma Hidalgo, enclavado en la Sierra Sur de Oaxaca, sigue siendo una zona de desastre tras una semana del paso del huracán Agatha, donde no hay alimentos ni agua potable y mucho menos energia eléctrica.
Están devastadas toda las plantaciones de café, se destruyó la infraestructura hotelera, la eco turística, las fincas y las carreteras, por lo que esa zona serrana de Oaxaca está prácticamente incomunicada.
El secretario municipal del ayuntamiento de Pluma Hidalgo, Rogelio Martínez Luján, lamentó que el huracán les haya pegado muy fuerte en la zona, "nos devastó, todas las cosechas se perdieron, ahorita en lo que es la cabecera municipal, sufrimos serias afectaciones".
"Cortes de energía eléctrica, nuestros suministros de agua potable, nuestras vía de comunicación terrestre, todos los accesos a las diferentes localidades, a la población de Santa María Huatulco, al entronque con la carretera federal 175 quedamos totalmente incomunicados”, señaló.
Apenas hace unos días, a través de un puente aéreo, el Ejército comenzó a llevar ayuda, mientras que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha logrado restablecer parcialmente la energía eléctrica, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) sigue reparando los caminos, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) está potabilizando el agua y la Secretaría del Bienestar inició los censos de las familias afectadas para identificar a los damnificados.
Pero, pese al despliegue militar, fuerzas de rescate y policías, la ayuda aún es escasa, porque hay gente en 16 localidades alrededor de 500 lugareños lo perdieron todo.
“Se habilitaron acá tres albergues, uno en la escuela primaria, uno en el bachillerato, otro en el templo católico, en el primer día se albergaron más de 100 personas, y con el paso de los días, pues fue disminuyendo, únicamente ahorita solo permanecen en el albergue los que tuvieron pérdida total de vivienda", informó el secretario municipal.
-¿Cuántos son?
"Ahorita tenemos de alrededor de 40 personas todavía en el albergue y en la escuela primaria tenemos 27 personas“, Rogelio Martínez Luján.
La autoridad municipal reporta, hasta el momento, un censo de 620 damnificados en su cabecera municipal y 47 viviendas con daño total, también tienen afectaciones el centro de salud, dos escuelas; preescolar y secundaria.
Sin embargo, el número total de los afectados aún no se tiene pues hay familias en localidades alejadas donde no ha llegado la ayuda.
Entre otras pérdidas está la de la producción de café donde el daño es irreversible y total, denuncian los finqueros, muchos de ellos siguen incomunicados.
En estos lugares, la gente de bajos recursos tiene que abrirse camino a machetazos, desde las mujeres hasta los hombres; los deslaves y la caída de árboles, son el nuevo panorama en medio de ese desastre.
Más de 4 mil hectáreas de café perdidas
El presidente municipal de Pluma Hidalgo, Josué Silva, informó a MILENIO que se perdieron alrededor de cuatro mil 500 hectáreas de cafetales
-¿Se perdió casi toda la cosecha?
“Se perdió la cosecha que estaba por venir, porque ya se perdieron plantaciones de café, habían ya matas que estaban en botón para producir en este año 2022. El año que viene definitivamente no habrá cosecha de café.”
Detalló que un 90 por ciento de los cinco mil 500 habitantes que conforman la población de pluma Hidalgo depende del café; en la jurisdicción municipal más cuatro mil 500 habitantes viven del campo y de la cosecha de ese grano, por lo que el edil pidió a los gobiernos federal y estatal que ayuden con la implementación de programas para salvar a esta gente, que no queden sin ingresos, que puedan sobrevivir.
Además, en las fincas cafetaleras, había proyectos ecoturísticos y con el paso del huracán Agatha todo se destruyó y no hay ninguna esperanza de recuperar algo.
Raúl Navarro, de la finca Independencia, explicó que con este huracán, el trabajo de 20 años de su vida en cinco horas lo perdió.
“Yo trabajé precisamente para decir, tengo una edad, puedo empezar a cosechar mis cedros, una plantación sustentable de madera fina con café y frutales, era dinero y capital invertido que ahora después de esta catástrofe suma cero, cero, cero, y dices es incalculable, es eso, incalculable”.
¿Tienes una idea de cuánto perdiste?
“No maches…la vida…” refiere.
¿Cuántos finqueros hay?
“Pues estamos hablando de cerca 250, son 650 productores, el padrón general y solamente sembrando vida tienen 250, o sea, quiere decir que 450 no tenemos nada, ni bienestar, ni sembrando vida, ni nada, solamente con nuestras propias uñas. Cuánto dinero crees que alcance para rehacer esto”.
La ayuda comienza a llegar, sin embargo, se concentra en la cabecera municipal del ayuntamiento de Pluma Hidalgo, pero se calcula que en 16 localidades sus habitantes tienen que abrir con sus propias manos sus caminos para buscar con qué sobrevivir porque el apoyo no llega aun.
Jacinto Ramírez, quien es campesino de 43 años, junto con César Aquino, jornalero de café, perdieron su trabajo y sus casas, con esa realidad reconocen que no les quedará otra que emigrar, “nos vamos a Estados Unidos de mojados, de ilegales, porque, como esta de fregado todo aquí en el pueblo y en Oaxaca, ya no quedan opciones de vida y tenemos que ir a buscar el dinero y la forma de sostener a nuestras familias”.
Al recorrer la zona devastada MILENIO encontró a un grupo de mujeres abriéndose camino con machetes para ir en busca de alimentos a las cabeceras municipales, pues el golpe del huracán Agatha además de dejarlas sin casas las dejó sin comida.
Mientras tanto, ya se forma una nueva tormenta tropical en el pacífico que amenaza con llevarse lo poco que no destruyó Agatha en esa humilde localidad serrana.
LG