Gaza. Los terroristas ofrecían intercambiar a todos los rehenes en 3 tandas; el premier elige la guerra y la “victoria en meses”
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, rechazó los términos que planteó Hamás para un acuerdo de cese del fuego y liberación de rehenes, comprometiéndose a continuar la guerra hasta “la victoria absoluta” y rechazando cualquier pacto que permita al grupo miliciano mantener control total o parcial de Gaza.
Las declaraciones de Netanyahu, que efectuó mientras el secretario de Estado estadunidense, Antony Blinken, se encuentra en la región para tratar de mediar un acuerdo de cese del fuego, son el indicio de que la difícil diplomacia puede ser descarrilada, y también dejan ver la amplia brecha que persiste entre Israel y Hamás al ingresar la guerra a su quinto mes.
Netanyahu señaló que la presión militar era la mejor forma para liberar a los cerca de 100 rehenes que siguen cautivos en la Franja de Gaza, donde fueron llevados después de que Hamás realizó un ataque transfronterizo en el sur de Israel el 7 de octubre, el cual detonó la guerra.
En la conferencia de prensa en la que respondió a las exigencias de Hamás, Netanyahu dijo que las fuerzas armadas israelíes habían alcanzado muchos de los objetivos que se trazaron y que la victoria era “una cuestión de meses”.
Dijo que el ejército había desmantelado 18 de los 24 batallones de Hamás, destruido túneles y abatido a milicianos, y que la presión militar sobre el grupo miliciano era la mejor forma de conseguir la liberación de los rehenes.
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Indicó que ya se llevan a cabo preparativos para que las fuerzas militares se adentren en la ciudad fronteriza de Rafah, en el sur del territorio, donde cientos de miles de palestinos desplazados se han refugiado tras huir de los combates.
“Estamos en camino de conseguir una victoria absoluta”, dijo Netanyahu. “No hay otra solución”.
El primer ministro hizo sus declaraciones en respuesta a un plan detallado de tres fases que presentó Hamás, el cual se desarrollaría a lo largo de 4 meses y medio. El proyecto, en respuesta a una propuesta de Estados Unidos, Israel, Qatar y Egipto, estipula que se liberaría a todos los rehenes a cambio de cientos de palestinos encarcelados en Israel, incluidos altos mandos del grupo miliciano, y que el conflicto llegaría a su fin.
“Ceder ante las delirantes exigencias de Hamás que hemos escuchado este día no solo no conduciría a la liberación de los cautivos, sino que simplemente abriría las puertas a otra masacre”, declaró Netanyahu en una conferencia de prensa televisada a escala nacional.
Tras las declaraciones de Netanyahu, un funcionario de Hamás, Osama Hamdan, confirmó que una delegación viajó a El Cairo para más conversaciones, una muestra de que las negociaciones continuarán.
Por su parte, Blinken indicó que aún es posible llegar a un acuerdo en la región.
“Aunque hay algunos puntos no negociables que han sido muy claros en la respuesta de Hamás, pensamos que crean espacio para que se concrete un acuerdo y trabajaremos en ello incansablemente hasta que lo consigamos”, dijo Blinken en una conferencia de prensa nocturna.