Los resultados preliminares de las investigaciones acerca de la agresión que sufrió un convoy en el que viajaba al titular de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), José Luis Cervantes Martínez, no precisaron que Julio César “N”, principal sospechoso detenido en flagrancia, detonara el arma de fuego que llevaba consigo, pero sí impactó su vehículo contra una de las unidades oficiales con el aparente objetivo de que saliera de la carpeta asfáltica; además, al ser sometido a un análisis, se determinó que habría consumido algún tipo de droga previo a los hechos.
En un informe detallado sobre los hechos ocurridos el jueves por la tarde en la Autopista México - Toluca, la Fiscalía aclaró que en las inmediaciones del municipio de Ocoyoacac el convoy fue alcanzado por un hombre que circulaba en una camioneta Jeep, Cherokee, color negro mate, con vidrios oscuros y placas de la entidad mexiquense.
El conductor aceleró y se acercó demasiado a una de las unidades oficiales que custodiaban al fiscal, lo cual consideraron como “un acercamiento peligroso”, por lo que, a través de comandos verbales y físicos, intentaron alejarlo, pero esto no dio resultado.
- Te recomendamos Abogado de detenido por atacar a fiscal de Edomex acusa que entre escoltas y policías se dispararon Policía
El sospechoso no detuvo la marcha de su vehículo y continuó con acercamientos laterales a alta velocidad, con la finalidad de desestabilizar la unidad oficial y provocar que impactara contra una valla de contención que colinda con el vacío.
De ahí que los agentes mostraron sus armas de fuego al presunto delincuente para tratar de que desistiera de la acción, pero su respuesta fue impactar en varias ocasiones el vehículo oficial, e incluso también mostró un arma de fuego. Ante esta situación, los elementos accionaron sus armas de fuego en la carrocería del vehículo para que detuviera su marcha.
Investigación
A pesar de que llevaba un arma de fuego, la fiscalía mexiquense no precisó que este hombre haya realizado detonaciones, sin embargo, puso en riesgo la integridad de los agentes, donde uno de ellos resultó herido.
La FGJEM agregó que al revisar la unidad hallaron un arma de fuego tipo fusil con tres casquillos útiles y tres percutidos, todos de calibre 762x39. También una chamarra táctica, una cangurera con presuntos narcóticos, diversas credenciales, una botella de bebida alcohólica, un arma punzocortante y artículos diversos presuntamente relacionados con prácticas rituales.