Gerardo Fernández Noroña busca suceder en el cargo a su compañero presidente Andrés Manuel López Obrador, como se refiere a él, bajo la bandera de la llamada Cuarta Transformación.
Pero antes de enfrentarse en el ring electoral contra el candidato de la oposición, debe ganarles a otros cuatro aspirantes: Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Ricardo Monreal.
La estrategia de Noroña para posicionarse entre la ciudadanía, a juzgar por lo que plasma en redes sociales, es la que ha manejado durante años: encabezar asambleas informativas en el país, difundir videos en Facebook y responder los comentarios de sus seguidores, o haters, en Twitter.
Noroña asegura que tiene una ventaja en comparación de sus compañeros del movimiento: él recorre los barrios y colonias mientras ellos siguen en “los espacios cupulares”. Además, en los sondeos realizados en redes sociales dice estar bien posicionado.
El legislador resalta los logros del actual gobierno, como el manejo de la pandemia de covid-19, aunque admite que no se ha logrado la pacificación del país, pero reconoce los avances en la materia.
Noroña considera importante invertir en las policías estatales y municipales y así regresar a las fuerzas armadas a sus cuarteles y pone sobre la mesa la necesidad de debatir la legalización de todo tipo de drogas.
En entrevista para MILENIO, el diputado federal del Partido del Trabajo (PT) anuncia parte de su estrategia de 2023 para ganar la encuesta de la 4T por nocaut; de ser presidente de México, la cuarta transformación se profundizaría y entre sus ideas que podrían implementarse está el restablecer la Constitución de 1917.
—Varios de la 4T han levantado la mano para buscar la candidatura presidencial en 2024, incluido usted. ¿Cómo ha sido el proceso de buscar mayor posicionamiento cuando, es evidente, hay otros aspirantes que tienen mayor presencia?—
“Yo no creo que tengan mayor presencia, tiene cargos más relevantes, que es diferente, pero con el respeto y el compañerismo que nos une, yo considero que mis compañeros y compañeras, que legítimamente aspiran, están atrapados en su propia aparente fuerza, pues no pueden salir a hacer recorridos al país, abajo, con la gente, están en los espacios cupulares, pero en los barrios, colonias, ejidos, en las poblaciones no han ido ni irán.
“Él único que está recorriendo abajo es un servidor, se burlaban, decían ‘¡ay sí, crees que de carpita en carpita vas a ganar’ y yo les digo: ‘de carpita en carpita me los voy a chingar’ porque estoy generando una condición muy buena abajo, yo creo… es una paradoja porque no está abierto el proceso, pero está abierta la discusión de quién podrá ser el relevo del compañero presidente López Obrador y en esa discusión yo tengo una situación muy favorable: gano prácticamente todos los sondeos que se hacen en las redes, prácticamente en todos.
“Y en las encuestas, los medios nacionales, la mayor parte deciden omitirme y las pocas que me incluyen me ponen en tercer lugar, que yo francamente creo que estoy en una posición mejor, pero no voy a discutir eso.
“Voy muy bien abajo, estoy generando una fuerza, no es un requisito que el compañero presidente te mencione, pero sin duda su palabra tiene mucha fuerza y ha reconocido que tengo, no sólo la trayectoria sino el respaldo debajo de la gente como para ser un aspirante para considerar”
“(El) 2023 va a ser el año definitivo, va a ser muy dura la batalla interna, aunque seamos compañeros, es la disputa por el poder y esa siempre muy descarnada. De mí parte no habrá golpes bajos, ni intrigas, ni fuego amigo, ni ninguna forma canalla de ser el abanderado porque estoy convencido en la unidad, estoy convencido que todos debemos mantenernos, cuando digo todos me refiero a todos.
—Hay quienes ven una especie de fractura próxima, en particular por los posicionamientos del senador Ricardo Monreal. ¿Por ese lado pudiera haber una fractura en el movimiento?—
“Ricardo Monreal ha tensado mucho y yo creo que ha cometido errores muy serios en este último tramo, particularmente de septiembre para acá, pero como le dijo el compañero Presidente, se lo dijo en otras palabras, a dónde vas que más valgas, o sea, no veo yo condiciones para que pueda ser candidato de la derecha, yo creo que la embajada de Estados Unidos va a imponer al señorito (sic) Claudio X. González y que no van a aceptar a nadie.
“A ellos (la derecha) les gustaría un rompimiento más que Monreal de Marcelo Ebrard, francamente creo que no romperá nadie, yo creo que nos vamos a mantener unidos.
“Es muy importante que discutamos el proceso, que garanticemos la unidad y la confiabilidad y la transparencia de la decisión para garantizar esa unidad. Hay animo y condiciones para hacerlo.
“Un rompimiento puede suceder, pero yo espero que todos pongamos nuestra responsabilidad para que eso no suceda".
—¿Qué le podría esperar a la 4T con usted siendo candidato y si la ciudadanía lo decide, presidente?—
“En esencia hacia la continuidad, aunque creo que conmigo habría una profundización. Estaba pensando en la mañana en un proyecto muy radical: restablecer la Constitución de 1917, nadie va a decir que es socialista o comunista.
“A estas alturas de la vida resulta que vivíamos mejor en el siglo XX que en el XXI, por ejemplo, los derechos de los trabajadores: antigüedad, aguinaldo, pensión, jubilación, reparto de utilidades y vacaciones, pues no se les da, eso viene desde la Constitución de 1917, el artículo 27; la educación pública, laica y gratuita.
“Yo restablecería la Constitución de 1917 porque he estado pensando mucho en un Congreso Constituyente que planteara, proyectara los derechos sociales del pueblo en el siglo XXI, pero parece que lo básico sería en esencia volver a esa Constitución.
“Ya oigo a algunos diciendo ‘no, es demasiado vieja’, Estados Unidos tiene la Constitución desde su fundación, 1776, finales del siglo XVIII, (…) me parece que debemos poner esa base, que además en el propio artículo 136 de la inviolabilidad de la Constitución se establece si llegaran gobiernos contrarios a los intereses del pueblo, todos los cambios que hagan a la Constitución no valen y una vez que el pueblo recupere su libertad, dice de manera muy hermosa, ‘la constitución volvería a valer’”.
—En estos recorridos que hace a ras del suelo, ¿Qué diagnóstico tiene de la población? ¿Están mucho mejor en comparación al gobierno pasado?
“Claro que están mucho mejor. La gente se olvida que en al inicio del quinto año de Peña se dio una gran rebelión popular contra los gasolinazos, enero de 2017, en Ixmiquilpan hubo tres jóvenes asesinados por la represión y Baja California tuvo una rebelión poderosísima de la gente, harta del golpe económico constante.
“Hoy, el dólar está más bajo que cuando entró el gobierno, que estaba en 24 pesos (sic), no han subido los combustibles, más que la inflación, más de 300 mil millones de pesos en subsidio para mantener los precios, sobre todo evitar que la inflación se fuera por ahí del 1 por ciento.
“Se ha invertido en políticas sociales como nunca: la pensión de adultos mayores llegará el año entrante, creo que, a 4 mil 400 pesos; se enfrentó la pandemia (de covid) de manera exitosa; se vacunó a todo mundo que quiso hacerlo, aunque decían que no íbamos a acabar nunca.
“Los resultados del gobierno son muy positivos, incluso en materia de seguridad. La derecha repite mentiras, pero no da cifras: más del 80 por ciento han bajado los secuestros (…), pero no hemos pacificado al país, de eso no hay duda, sigue la pesadilla de la inseguridad y la violencia, pero el avance es evidente, ahí están los datos duros.
“Con el gobierno usurpados (sic) de Calderón creció casi 200 por ciento los homicidios, con el de Peña creo que fue 150%, con nosotros ha disminuido 10%. Estoy mencionando cifras de memoria”.
—¿En su perspectiva habría que ajustarle algo a la estrategia de seguridad o no le movería nada?—
"Sí, yo creo que tienes que ir construyendo en paralelo, una inversión importante para policías estatales y municipales, pues muy profesionales, capacitadas y bien armadas.
"Un ejemplo, en Ciudad Juárez, Chihuahua, la gobernadora (María Eugenia Campos) quiere hacer una torre vigilante, va a gastar creo que 2 mil millones (de pesos), y los policías ahorita no tienen ni una chamarra abrigadora para el invierno; unas pistolitas pedorras (sic) ahí de armamento en mal estado, pero está pensando hacer una torre para hacer negocio con dinero público, eso no puede ser.
“Hay que hacer una inversión importante en esa parte para regresar a las fuerzas armadas a los cuarteles y creo que hay que abrir una discusión muy seria en el país y América Latina sobre la legalización de todo tipo de drogas porque Estados Unidos es el principal consumidor de droga en el mundo y es un negociazo, ellos no bajan nada el consumo y nosotros ponemos los muertos, a nosotros nos echan la culpa de la violencia cuando ellos siguen en la fiesta, tienen que cambiar las cosas".
—¿Cómo inició esta historia de compañerismo entre usted y el Presidente?
“Lo conozco desde la fundación del PRD, a mí siempre me causó, no porque esté en la presidencia, siempre me causó admiración, siempre me pareció un dirigente muy sólido.
"Fíjate, los hubiera no existen, pero estuvieron a punto de comisionarme como delegado de la dirección nacional del PRD para acompañar el éxodo por la democracia que encabezó el hoy compañero Presidente hace muchas décadas, seguro se hubiera construido una relación personal más cercana.
“Tenemos una relación de compañeros, no de amistad, pero muy cercana de compañeros, de mucha coincidencia y desde el PRD lo conozco.
“Yo alguna vez en Zacatecas… había estas organizaciones no gubernamentales y generaron unos foros en la Universidad de Zacatecas y allá lo fuimos a ver mi hermanita que ya murió, María Fernanda Campa, y dijimos ‘ese hombre tiene patas para gallo’.
“Tuve un momento de mucha cercanía en la campaña del 2006 cuando fui vocero del PRD, fui parte de la dirección del movimiento, fui el vocero del plantón (de Reforma) en esa época muy difícil y luego mantuvimos una relación de mucha comunicación cuando fui diputado de 2009 a 2012 en que un grupo de diputados del PRD, PT y Convergencia (hoy Movimiento Ciudadano) nos coordinábamos con él.
“A partir de 2012 seguimos caminos paralelos, nunca confrontados, y nos hemos vuelto a reencontrar, yo le tengo enorme aprecio. admiración, respeto y cariño. Es un hombre excepcional.
—No lo ha expresado tal cual, pero da la idea de que hay una lealtad, que en política es difícil ver. ¿Cómo se construye eso?—
“Es una cosa de principios. Hay quien confunde la lealtad con servilismo, hay quien confunde la lealtad con incondicionalidad.
“Te voy a poner un ejemplo: hace poco tuvimos una discusión fuerte al interior de la fracción del PT y yo les reclamaba no haberme alertado sobre un error que estábamos cometiendo y alguien decía ‘es que lo propuso el líder’ y otra persona comentó ‘si lo propone el líder, aunque se equivoque’.
“Yo dije ‘estás diciendo una barbaridad’, justo si quieres proteger al líder tienes que decir cuando tú crees que se equivoca, no quiere decir que tengas la razón o no, pero es tu responsabilidad alertar sobre la posibilidad de una equivocación porque sino estás siendo incondicional, pero no compañero, mucho menos útil, la lambisconería siempre está muy presente en la política, sobre todo cuando estás en posiciones de poder, pero es lamentable ese tipo de prácticas se mantengan.
“Yo mantengo una relación de esa naturaleza con el compañero Presidente, yo nunca le he dicho lo que quiere oír, nunca le he dicho cosas que busquen generar una relación de lambisconería, siempre actuado como hombre libre, con toda lealtad le planteo cuando tengo una diferencia y lo hago con la intención de fortalecer su liderazgo y el movimiento, no con la intención de vulnerar".
—¿Cuál es la estrategia para en 2023 consolidarse?—
“Voy a hacer una gira de enero a abril por todas las capitales y buena parte de las 100 principales poblaciones del país, que se llama El Pueblo Decide, una gira muy intensa y luego voy a tratar de llegar a los más de puntos posibles con la intención de ir fortaleciendo la simpatía de la gente e ir generando condiciones de que la gente se manifieste previo a la encuesta.
“Yo quiero ganar por nocaut, que sea muy claro que la simpatía de la gente está conmigo (…)”.
JLMR