Las Gran asamblea de damnificados, Unidos por Tula, otras organizaciones y ciudadanos pugnarán por un proyecto hídrico integral para la zona de Tula y por ello presentarán nuevamente sus propuestas técnicas a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), aunque aclararon que no se opondrán ni detendrán los trabajos básicos urgentes que se realizan en el río Tula para evitar nuevas inundaciones.
Así lo señalaron en una rueda de prensa conjunta este jueves, en la que subrayaron que la exigencia por el rescate del río, su oposición al revestimiento del mismo, a la tala de árboles y al envío de más agua residual al Valle del Mezquital, así como la puesta en operación de vasos reguladores y la construcción de plantas tratadoras en el Valle de México y su zona metropolitana se mantienen.
María Berenice Pecina Jiménez, de la Gran asamblea y Noé Paredes Meza, de Unidos por Tula, dijeron que el Plan hídrico presentado es de emergencia, de cara a la temporada de lluvias, y no contempla las propuestas técnicas que han presentado en los últimos años por lo que pedirán que se incluyan; el próximo lunes las organizaciones se reunirán para armar la propuesta conjunta que entregarán al alcalde de Tula, el gobernador de Hidalgo y al titular de Conagua.
Consideraron positivo que se desarrollen trabajos necesarios como el desazolve del río, subir la altura de los puentes y retirar la vegetación muerta en la zona para mejorar el flujo.
Indicaron que además solicitarán a los diputados federal y local, Cuauhtémoc Ochoa Fernández y Octavio Magaña Soto, respectivamente, un informe detallado sobre las gestiones de recursos y acciones que han realizado a raíz de la inundación, para conocer los montos de los recursos que se aplicarán y bajo qué modalidad.
Colchones
Sobre el tema de los colchones ambas agrupaciones indicaron que solicitarán la intervención de la Comisión Federal para la Prevención de Riesgos Sanitarios (Cofepris) y harán las denuncias correspondientes ante las distintas instancias para que se finquen las responsabilidades a los involucrados en este tema.
Acusaron que el gobierno municipal pretende deshacerse de las pruebas en el caso de los colchones en mal estado y por ello convocaron al canje de estos el pasado miércoles, jornada en la que se canjearon 60 colchones, además de referir que se han presentado presuntos actos de intimidación de parte de funcionarios municipales hacia los damnificados que participaron en las protestas por el tema de los colchones reciclados.
Por su parte Román Romero Arteaga, representante de la empresa AVM, la cual pagó el monto por cien colchones a solicitud de apoyo de la alcaldía, reiteró la intención de la firma para recurrir ante las instancias correspondientes para solicitar el reembolso del dinero y añadió que la empresa apoyará directamente a parte de las familias afectadas.