La abogada y activista pro animal, Daisy Espinosa Carrillo, afirmó que, hasta este momento “no conozco un solo caso que se le haya dado castigo a las personas que han maltrato, violentado y han matado a animales en Hidalgo”, situación que asegura se da porque se deben hacer reformas a la ley de protección animal, “pero de mínimo se tendrían que aplicar las sanciones económicas y de prisión, porque con rescatar al animal que está sufriendo esta situación, no se erradica el problema de raíz”, aseveró.
Señaló que, el problema del maltrato animal ha existido siempre pero, actualmente ha incrementado el conocimiento de estos casos gracias a las redes sociales. Sin embargo, las personas que graban estos actos, así como las que son testigos, como un deber ciudadano tendrían que ir a realizar la denuncia ante las autoridades correspondientes para que haya un verdadero castigo y se erradique esta problemática que cada día aumenta más en el estado.
“Ahora estos temas se han vuelto públicos por el avance de las tecnologías y las redes sociales que nos permiten como ciudadanos tener acceso a la información y denunciar, pero el maltrato y la crueldad animal ha existido siempre, y por lo menos de hace más de 30 años que a los animales no se les veía como seres dignos de un respeto, se normalizaba el maltrato, aunque creo que se está despertando esta consciencia.
“Sin embargo, en este momento otro tema relevante dentro de esta problemática es la denuncia porque, la gente difícilmente denuncia, pocas se atreven a interponerla, porque no solo basta con denunciar por internet, se le debe dar formalidad, porque estos casos no se están realizando con apego a lo que las leyes exigen y solo por redes sociales, pues la gente se entera, se indigna y, cuando se puede, se rescata al animal, pero no hay castigos para los culpables, situación que provoca que reincidan en estos actos”, sostuvo.
Señaló que es la primera vez que un gobernador estatal hace un pronunciamiento sobre el maltrato animal, lo cual suma demasiado a la casusa, pero, a pesar de ello, hasta el momento no hay castigo para quienes han sido responsables de los actos de violencia como el caso del burro maltratado en Zempoala, que al final fue rescatado por el activista Arturo Islas Allende pero no se sancionó al maltratados, o el de un perro maltratado en Chapulhuacán, en el que un funcionario público estuvo involucrado y solo fue apartado de sus funciones, pero no hubo una sanción más allá de esa.
“El caso del perrito al que le dispararon en su hocico, estando dentro de propiedad privada, lo último que supe fue que, a pesar de que el dueño fue a denunciar a las instancias correspondientes, le dijeron que no procedía porque la situación no había sido contra él, entonces esto jamás se va a detener si se continúa si sancionar a los responsables”, dijo.
Hay una Ley de protección animal en la que hay castigos y sanciones para quienes incurran en este delito pero, en la praxis esto no existe porque la ley es limitada porque el único que tendría la facultad es la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), o un juzgado, pero lo que sí pueden hacer cumplir los municipios son las multas, “situación que tampoco se ejerce y por eso, cada día se dan a conocer más casos de violencia y maltrato en contra de los animales”, concluyó.