La oficina en México de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) llevaron a cabo el Foro Nacional de Diálogo denominado: Identificación, intercambio de experiencias, retos y buenas prácticas en materia de acceso a la justicia para personas migrantes.
Durante la inauguración del evento, la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, y la Oficial Nacional del Programa Regional sobre Migración Mesoamérica de la OIM, Laura Canché, enfatizaron en la necesidad de sumar esfuerzos para brindar una protección integral a las personas migrantes.
Piedra Ibarra reconoció que las personas migrantes son más propensas a ser víctimas del crimen organizado, secuestro, trata de personas, explotación laborar y maltrato. Por ello, señaló la urgente necesidad de una política migratoria cuyo centro sea el respeto a los derechos fundamentales de la persona, y brindar herramientas que les permitan transitar en México de manera segura y con el apoyo necesario en caso de una estancia prolongada.
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Por su parte, Laura Canché explicó los contenidos del Pacto Mundial para la Migración que se adoptó en diciembre de 2018 por la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), la cual implica impulsar la mejora de condiciones de las personas migrantes a través de la cooperación internacional, y que busca eliminar las diversas formas de discriminación y reducir las vulnerabilidades.
El foro contó, además, con las participaciones de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), el Instituto Federal de Defensoría Pública, comisiones estatales de derechos humanos y organizaciones de la sociedad civil, quienes señalaron que, las personas migrantes se encuentran en un contexto de discriminación y prejuicio sin fundamentos, pues muchas de las perspectivas que se tienen de ellos son erróneas y eso conduce a la violación de los derechos humanos de las personas en movilidad.
También destacaron el establecimiento de vínculos con organismos internacionales y organizaciones de la sociedad civil, las cuales “permitirán abonar, en la práctica, una atención directa, humana e integral a las personas”.
ATC