Al hacer un llamado a Agua y Drenaje de Monterrey para que refuerce las campañas de concientización, los alcaldes de Escobedo y Santiago, Andrés Mijes y David de la Peña, respectivamente, revelaron que durante la crisis hídrica tuvieron que invertir millones de pesos en pozos someros, infraestructura, pipas y demás soluciones rápidas para atender la problemática humanitaria.
Durante el programa Cambios, conducido por Víctor Martínez, Andrés Mijes, de Escobedo, informó que se generó un gasto superior a los 25 millones de pesos que salieron de una reasignación de los recursos de programas que ya estaban establecidos, al tiempo que David de la Peña, de Santiago, erogó cinco millones de pesos porque su municipio no tuvo tantos problemas hídricos.
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“Escobedo se ve afectado por las partes altas y la parte norponiente se quedaban regularmente sin agua y de repente amanecía sin agua, hay quien llegó a pasar 20 días sin agua. Lo que hicimos nosotros es echar mano de los recursos municipales, instalamos 90 tinacos de 10 mil litros e instalamos 50 tinacos en escuelas junto con el apoyo de gobierno estatal y federal.
“Se conformó un equipo que llegó a tener hasta 80 pipas diarias y, sin embargo, no logramos el abasto. Esta situación nos generó un gasto superior a los 25 millones de pesos que obviamente lo que hacemos es reasignar los recursos de programas que ya estaban establecidos y le entramos al tema del agua.
“Lo importante es resaltar que ya se ve la luz al final del camino, que con las inversiones del gobierno federal nos va a dar una salida para los próximos 10 años”, dijo Mijes.
El estado, los alcaldes y la ciudadanía, añadió el munícipe, deben crear conciencia para cambiar la cultura del uso del agua, “porque somos muy despilfarradores en materia de agua y urgen proyectos de infraestructura a largo plazo”.
Mientras que el santiaguense David de la Peña presumió que hasta ayer había un llenado de la presa de La Boca del 80%, al tiempo que instalaron 15 tanques de 10 mil litros y 65 tinacos en escuelas para que los padres no tengan problemas con enviar a sus hijos a clases.