El senador del PT, Alejandro González Yáñez presentó una iniciativa para inscribir con letras doradas en el Muro de Honor del Senado la leyenda: “A los trabajadores de la CFE por su titánica hazaña en la reconstrucción de la infraestructura eléctrica en Acapulco”.
El legislador destacó que, tras el impacto del huracán Otis, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) emprendió acciones inmediatas para restablecer el servicio eléctrico a la brevedad posible, con lo que consiguió restituir el suministro al 40 por ciento de los 504 mil 434 usuarios afectados en el estado de Guerrero.
Además, expuso que, para la atención de esta emergencia, la CFE dispuso de un equipo conformado por 846 trabajadores electricistas, 96 grúas, 347 vehículos, 26 plantas de emergencia y un helicóptero.
Agregó que tan solo durante la primera noche se logró energizar 12 bombeos de agua en las localidades de San Marcos y Copala, así como los bombeos adjuntos a Pozos Raney del Papagayo y Salsipuedes, que son estratégicos para beneficio de Acapulco y poblaciones aledañas, además de la central de Telmex que permitió mejorar la comunicación en la ciudad de Acapulco.
De igual forma, puntualizó, se restablecieron las líneas de alta tensión, postes de media y baja tensión y servicios individuales de la población en general, como la Avenida Costera Miguel Alemán, el Centro de la Ciudad, Costa Azul y el Renacimiento.
González Yánez consideró que, gracias a la entrega, compromiso, valor y determinación, de parte de todo el personal de la CFE se logró recuperar la región de uno de los peores desastres que se ha visto en nuestro país.
Finalmente, indicó que no se debe olvidar que estos héroes arriesgaron su vida por el bienestar colectivo, ya que, desafortunadamente, en este esfuerzo realizado por las y los trabajadores de la CFE se reportó el fallecimiento en el cumplimiento de su labor del trabajador Octavio César Santana Rayo.
Por lo anterior, González Yáñez enfatizó que los trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad tienen que ser reconocidos por lo que fue, “una hazaña de ingeniería que permitió restablecer gradualmente el servicio de electricidad a los hogares guerrerenses”.