Amigos y algunos miembros del Partido Revolucionario Institucional (PRI) dieron el último adiós al ex presidente Luis Echeverría Álvarez, quién falleció el pasado viernes en su residencia en Cuernavaca, Morelos, a la edad de cien años.
Augusto Gómez Villanueva, decano de la Cámara de Diputados, dijo que en los próximos días la cúpula del partido realizará un homenaje. "Es un homenaje, y también haremos otro homenaje en la presentación del libro de memoria del ex presidente Echeverría (…) desde luego en el partido", comentó.
El sábado por la tarde su cuerpo fue velado en una funeraria en el memorial de Santa Fe y hoy una camioneta blanca Mercedes Benz trasladó su cuerpo al Panteón Español.
El cuerpo ingresó al crematorio, dos horas y media después, solo se escucharon unos aplausos. Fueron pocas las personas que llegaron al panteón para despedirlo, sobre todo, algunos de sus ex colaborades.
"Estoy convencido que merece una ceremonia de Estado y quiero decirles que gran parte de la campaña feroz que se emprendió contra él, fue porque sus políticas no gustaron en el norte", comentó Jesús Ruiz Barraza, rector de la Universidad de Tijuana.
"Lo voy a recordar como un gran jefe, como un extraordinario compañero de trabajo, nos enseñó a escuchar", recordó Joaquín Martínez Chavarria , director general del Indeco.
El ex presidente de México Luis Echeverría dirigió al país de 1970 a 1976. Su figura política representa muchos momentos históricos como el autoritarismo, el gran presidencialismo metaconstitucional que tiene como sus lados más visibles el 2 de octubre de 1968; El Halconazo, en 1971 y la guerra sucia.