El coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira, criticó el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para el próximo año al calificarlo como ficticio, insuficiente y centralista.
En redes sociales, el legislador dijo que, otra vez, las entidades federativas son víctimas del centralismo al señalar que solo siete entidades contarán con presupuesto para carreteras: Oaxaca, Veracruz, Hidalgo, San Luis Potosí, Guerrero y Durango.
Consideró que un verdadero gobierno de izquierda debe de transferir recursos y hacer infraestructura para beneficiar a la población.
Dijo que en el caso de Morena "estamos ante un partido conservador, para luego exponer que hay menos dinero, también para infraestructura hidráulica y salud". Además, en temas de seguridad dijo que las policías municipales están siendo olvidadas.
Al realizar un análisis inicial durante la transmisión en vivo en las redes sociales, el líder congresista, el especialista en finanzas, Mario Di Costanzo, y el secretario técnico de dicha bancada, Miguel Ángel Sulub, coincidieron en que hay parámetros muy optimistas, que no concuerdan con la realidad, como el de la producción de petróleo, la tasa de interés, inflación y el déficit público.
Consideraron que es irreal estimar que se producirán 1.9 millones de barriles de petróleo diarios, cuando hoy la cifra es de 1.5 millones y en 2018, en la Administración anterior, era de 1.8 millones, y más cuando para 2024 el presupuesto para inversión en Pemex se redujo en 215 mil millones respecto a 2023.
Moreira Valdez aseguró que México nunca ha producido el volumen que dice el paquete fiscal.
En relación a la tasa de interés, explicaron que actualmente está en 11.25 puntos, por lo que calificaron como ilusorio que llegue al 10.3 por ciento estipulado en el documento hacendario, ya que tendría que estar muy por debajo esa estimación para que ese fuera el promedio
Sobre el déficit público, el legislador priista señaló que serán las nuevas generaciones las que tendrán que pagar la deuda, mismas que se verán más afectadas por tener que devengar más por la inflación que causa la extorsión a transportistas y el narcotráfico.
Detallaron que la deuda en 2018 era de 10.5 billones de pesos y con el gobierno actual se pretende aumentarla a 16 billones, por lo que hay un crecimiento del 60 por ciento.
Los analistas expusieron que, en el rubro de salud, la mayor reducción es para el ISSSTE en materia de adquisición de medicinas, donde si ya hay problemas, habrá más.
Indicaron que hoy en día son 50 millones de mexicanos sin servicio médico y que a pesar de ello se pretende reducir en más de cinco mil millones de pesos el gasto de inversión a la Secretaría de Salud, por lo cual no se tendrán recursos para mantenimiento y rehabilitación de hospitales o construcción de los centros de salud que se requiere para atender a la población.
El coordinador parlamentario refirió que también en infraestructura hidráulica hay reducciones del orden de los 14 mil millones de pesos; principalmente en lo que se refiere a agua Potable, alcantarillado y saneamiento; en lo que se refiere a modernización y rehabilitación de riego temporal y que al igual que en el caso de las carreteras sólo 11 entidades contarán con proyectos de este tipo: Guanajuato, Jalisco, Ciudad de México, Hidalgo, Nuevo León, Sonora, Sinaloa, Michoacán, Coahuila, Edomex, Nayarit.
Moreira Valdez anunció que en la semana que inicia el 18 de septiembre, el grupo parlamentario tricolor realizará un foro virtual para profundizar en los alcances y consecuencias de lo que se pretende con la propuesta de presupuesto 2024 del gobierno federal.
MAT