La propuesta para legalizar el cultivo de amapola hecha por el secretario de Defensa, Salvador Cienfuegos generó distintas reacciones entre quienes consideran que es parte de la agenda internacional y los que piden al general no hacer declaraciones políticas.
Erubiel Tirado, coordinador académico del Programa de Seguridad Nacional y Democracia de México de la Universidad Iberoamericana, consideró que el general debe quedarse callado y no hacer declaraciones políticas en torno al tema, en contraste la directora de Mexicanos Unidos Contra la Delincuencia, Lisa Sánchez, señaló que es viable la legalización de la droga con fines medicinales y científicos porque es parte de la agenda internacional.
En entrevista para MILENIO, Erubiel Tirado señaló que no hay recetas mágicas para la discusión de la legalización de las drogas, sostuvo que debe ser paso a paso y con una política integral que resuelva a la par el problema de inseguridad y crisis humanitaria en México.
El catedrático subrayó que los titulares de la las Secretarías de la Defensa Nacional y Marina deben mantenerse reservados e institucionales de los temas de política pública, consideró preocupante que Cienfuegos se pronuncie a favor de las propuestas del presidente electo Andrés Manuel López Obrador, como si no hubieran terminado las campañas.
“Las fuerzas armadas empezando por los titulares de la Defensa y la Marina deberían mantenerse callados y no ser deliberantes en cuanto a este tipo de temas. Es una cuestión de definición constitucional y una cuestión de que al momento en el que abren la boca los mandos militares para intervenir directamente en política eso los convierte en actores deliberantes en un entorno en el que por principio de cuentas deberían mantenerse reservados de este tipo de discusiones”.
Esto, un día después de que el secretario de la Defensa Nacional opinara que la legalización de la amapola para usos científicos y médicos es una propuesta correcta y puede ser una salida al problema de la violencia.
Erubiel Tirado consideró que más que una propuesta parece un distractor y dijo que antes de que se debata solo en sí deben o no legalizarse las drogas debe haber una definición clara de diseño legal e institucional de las políticas de salud, del tejido social y de la reconstrucción de la gobernabilidad en México.
Añadió que a nivel local se deben analizar primero los problemas endémicos de violencia en entidades como Guerrero y aseguró que si no se atienden primero estos temas antes de hablar de la legalización de las drogas, en este caso el cultivo de la amapola, no se resolverá nada.
“Debemos ir desglosando este tema poco a poco, es para mí un distractor por un lado y antes que nada no debería pronunciarse (Salvador Cienfuegos) como no debió pronunciarse en otros aspectos como lo están haciendo últimamente lo cual a mí me denota más una actitud de campaña de posicionamiento de las fuerzas armadas para que no los toquen” subrayó.
En entrevista aparte, Lisa Sánchez consideró viable y mesurada la propuesta del general secretario, recordó qué hay tratados internacionales en la Organización de las Naciones Unidas para la regulación de la amapola con fines médicos y científicos, además subrayó qué hay más posibilidades que con la mariguana.
“Nosotros lo hemos trabajado desde hace un montón de años, en realidad, viabilidad como tal tiene y mucho más que la mariguana porque en el cultivo de amapola sí hay un marco regulatorio internacional previsto en las convenciones de la Organización de las Naciones Unidas, estrictamente para fines medicinales y científico. Aproximadamente 24 países hoy en día cultivan y producen amapola con estos fines”, subrayó.
Añadió que los países que cultivan y producen amapola con estos fines lo hacen a través de un modelo regulatorio, un mercado cerrado donde la producción se traslada directamente a la manufactura de medicamentos y no pasa por el usuario final como pasaría con el tema de mariguana donde sí podrías pensar en dispensarios, clubes o salas de consumo.
Para ello, dijo, hay únicamente dos requisitos, uno es la creación de burocracia especializada para su control y la no desviación a mercados ilícitos.
Detalló que se hace en función de cuotas: si la demanda internacional permite aumentar la producción se aumenta el número de toneladas producidas; si la demandada internacional no lo permite, no se aumenta y esto únicamente pasa por la autorización del Consejo Económico y Social de Naciones Unidas.
La activista calificó como una buena señal lo dicho por el titular de la
Defensa Nacional porque muestra apertura y reconocimiento de que el tema de la legalización del cultivo de la amapola con fines medicinales y científicos está no sólo en la agenda del nuevo gobierno del presidente electo, sino que forma parte de un debate internacional.
Lisa Sánchez consideró que no considera que lo dicho por el general signifique que es el tiempo definitorio para el discusión.
“Yo no consideró incorrecto que se pronuncie sobre un tema que está en la agenda de debate nacional, me parece que es una señal de que los tiempos están cambiando, es una señal de que la tendencia es internacional y va hacia allá y es una señal de que el Ejército básicamente encontraría una mejor posibilidad en la regulación legal de estas sustancias que en su erradicación forzosa”, subrayó.
OVM