La desatención a las escuelas en diferentes ámbitos representó vulneraciones a la niñez y adolescencia mexicana en el 2022, refiere el Balance Anual de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), en el cual se destacan incidencias que repercuten en el derecho a la educación, la integridad personal y la salud de las y los menores de edad.
En el documento se señala que la eliminación del Programa de Escuelas de Tiempo Completo vulneró los derechos humanos a la educación y a la alimentación de 3.6 millones de niñas, niños y adolescentes, pues 27 mil 63 escuelas en el país brindaban atención bajo este esquema. Redim calificó esta decisión de la Secretaría de Educación Pública (SEP) como una “falta de progresividad''.
Asimismo, el organismo secundó la advertencia del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia en México (Unicef), respecto al impacto que tienen las escuelas en la nutrición mexicana, pues en dicho balance anual, reiteró que el alto consumo de productos ultraprocesados y bebidas azucaradas en las escuelas está generando riesgo para la salud de niños, niñas y adolescentes, además de impactar de forma negativa en el ambiente.
De acuerdo con El Poder del Consumidor, en un plantel de educación básica se consumen, en promedio, 550 calorías por persona a través de tres productos ultraprocesados (lo que genera un aumento en el peso de esta población de cinco kilos al año), y se pueden generar hasta mil 711 residuos contaminantes provenientes de estos productos.
Actualmente, cuatro millones de niñas, niños y adolescentes ya viven con sobrepeso y obesidad, lo que hemos aprendido durante la pandemia es que esto constituye una comorbilidad.
En contraste, el Programa presupuestal para la prevención y Control de Sobrepeso, Obesidad y Diabetes es parte de los 21 programas para la atención de niños, niñas y adolescentes cuyo monto asignado para 2023 no aumentó con respecto al porcentaje de inflación que estimó la Secretaría de Hacienda, equivalente al 3.3 por ciento, lo cual implica un decremento en términos reales de los recursos asignados del -40.5 por ciento.
Por otra parte, la Redim aseveró que los ataques a las escuelas, intoxicando estudiantes a través de agua o alimentos, ocurridos en Chiapas en octubre pasado, deben atenderse, investigarse y sancionarse también como ataques a su supervivencia y desarrollo. En ese sentido recordó que los organismos en favor de la niñez siguen a la espera de resultados de las indagatorias y las sanciones correspondientes.
La Redim recordó que las escuelas son espacios de protección y de recuperación tras la pandemia, por lo que considera pertinente garantizar la prevalencia del Interés Superior de la Niñez en toda decisión pública, así como cumplir con las recomendaciones de organismos internacionales y fortalecer el Sistema de Protección (SIPINNA) a través de la ampliación de su presupuesto, mejora de sus facultades políticas y respaldo de alto nivel para transversalizar el enfoque de derechos de niñas, niños y adolescentes.
EHR