Elementos de la Policía Auxiliar (PA) de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México acudieron a las instalaciones de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), ubicadas en la alcaldía Tlalpan, tras el reporte de un artefacto explosivo.
A través de frecuencia de radio, los oficiales —que estaban realizando recorridos de vigilancia en la colonia Isidro Fabela— fueron alertados sobre el hallazgo de un presunto artefacto explosivo en las inmediaciones del plantel educativo, ubicado entre el cruce de la calle Zapote y el Periférico Sur.
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¿Falsa alarma o amenaza de bomba?
Posteriormente, los oficiales capitalinos se trasladaron al lugar de los hechos, donde se entrevistaron con personal administrativo del plantel, quienes informaron que, el miércoles 9 de octubre, recibieron una llamada de advertencia sobre una posible bomba al interior de la escuela.
Ante esto, los policías activaron los protocolos de explosivos y desalojaron aproximadamente a 500 personas que se encontraban en el plantel, entre ellas estudiantes y profesores.
De esta manera, los oficiales solicitaron el arribo de los elementos de la Policía Metropolitana, del Agrupamiento Zorros quienes realizaron los recorridos en la zona para ubicar el presunto artefacto explosivo.
Sin embargo, la unidad anti-explosivos no encontró nada que pusiera en riesgo a los estudiantes y la plantilla docente, por lo que se retiraron del lugar, informó la SSC de la Ciudad de México.
"Nunca sabes si es verdad o mentira la emergencia"
En una entrevista que tuvo MILENIO con uno de los integrantes de la Agrupación Zorros hace un par de años, el oficial Raúl Páez mencionó que:
“Es un riesgo el que llevamos, pero gracias al apoyo de mis compañeros y de los instructores hemos sido capacitados arduamente para llevar a cabo y desempeñar nuestras funciones como debe ser”.
Con 10 años en la corporación, Raúl Páez señala que la gente—sin saber el esfuerzo que hace— suele menospreciar su labor y en el caso de él, la ciudadanía “juega con el trabajo del policía” cuando se reportan emergencias de supuestos explosivos, se acude al lugar y se monta todo el operativo con el equipo, pero resulta que todo era broma.
“Las complicaciones ante emergencias de este tipo es que no te puedes mover fácilmente como debería, es un riesgo que se lleva porque nunca sabes si es verdad o mentira la emergencia, pero sí es cansado llevar este traje más aparte el calor corporal que se genera".
Raúl Páez es uno de los 100 policías especializados en estas acciones, algo que para él, es un orgullo a pesar del riesgo incluso de salir lastimado o arriesgar su vida.
RM