Carlos Tello Macías recorre una línea del tiempo trazada desde los inicios de la revolución rusa en 1917 hasta la actualidad: una ruta de esperanza y horror, tropiezos y aciertos, totalitarismo y debilidad, que ha llevado al país más extenso del planeta a la paradoja en que hoy se encuentra. Jugar un papel determinante en la economía mundial y no haber resuelto conflictos y tensiones que hace 25 años generaron su colapso. Influir en la agenda del mundo, sin tener clara la propia: arrastrar un Estado débil, fragmentado, ineficiente y corrupto. Vivir la tendencia endémica de caer en los extremos
Rusia, los años recientes
Es impresionante la forma como se transformó el extremo oriental del viejo continente en unas cuantas semanas después de disuelta la URSS.
Ciudad de México /
LAS MÁS VISTAS