Vandalizar Palacio Nacional es una ganga para todos. Cada vez que hay manifestaciones violentas cuyos participantes pintan, ensucian o intentan prender fuego al edificio histórico, el gobierno no gasta ni 25 mil pesos.
En los dos últimos años, la Dirección General de Conservaduría de Palacio Nacional, que depende de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), registró nueve ataques al inmueble que merecieron una intervención para limpiar la cantera o la madera de las grandes puertas del sitio.
“Se ejecutaron diversas actividades y erogaron recursos de su presupuesto para dar atención a los daños perpetrados al inmueble de Palacio Nacional en diversos eventos durante 2019 y 2020”, informó la SHCP.
Y es una ganga para todos porque a pesar de ser un inmueble catalogado y sufrir daños intencionales por parte de manifestantes, nadie es detenido o multado. Sale barato atacar Palacio Nacional.
A lo más, los actos vandálicos se quedan en enfrentamientos con la policía o breves detenciones en las patrullas aledañas al zócalo.
Durante 2019 y 2020, la SHCP erogó solo 142 mil 500 pesos en reparar pintas, golpes a las puertas y las paredes.
La intervención más cara fue el 26 de septiembre de este año, cuando se gastaron 24 mil 500 pesos (18 mil 500 para limpiar la cantera de la fachada poniente y 6 mil más para materiales de limpieza de la madera del portón central).
En esa ocasión, los manifestantes marcharon en la capital para conmemorar el sexto aniversario de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, y llenaron de pintas el inmueble.
En tanto el 8 de marzo de este mismo año, grupos de mujeres encapuchadas hicieron pintas en Palacio Nacional, lanzaron petardos y bombas molotov al inmueble en el contexto de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer. Estos ataques costaron 23 mil pesos (17 mil 200 para limpiar la cantera y 5 mil 800 para el portón central).
El monumento histórico también sufrió daños el 14 de febrero mientras se llevaba a cabo una manifestación para reclamar al gobierno por el feminicidio de Ingrid Escamilla.
En esta manifestación, el Palacio Nacional sufrió pintas en las fachadas poniente y norte, además de golpes y pintas en la Puerta Mariana y la puerta de acceso de la Calle de Moneda, así como en la de Atención Ciudadana, ubicada en Correo Mayor.
Pese a ser la más aparatosa no fue la más cara. El gasto fue de 17 mil 500 para limpiar paredes y 5 mil para la puerta.
En 2019, también en una manifestación por el caso Ayotzinapa, las pintas a la cantera significaron un gasto de 17 mil pesos.
El año pasado, la Conservaduría de Palacio registró ataques a la Puerta Mariana y a la puerta de acceso de la calle Moneda, sin embargo, en ninguno de ellos se necesitaron recursos extraordinarios para realizar reparaciones.
El último daño registrado en Palacio Nacional ocurrió el 25 de noviembre pasado, en el contexto de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en el que a pesar de que se desplegó un dispositivo de seguridad con vallas y elementos de la policía, grupos de encapuchadas lograron romper el cerco y dañar el inmueble.
De 2019 a 2020. En los dos últimos años, el gasto por las intervenciones fue de 142 mil 500 pesos
07/2019
• El 23 de julio de ese año se registraron golpes a la puerta Mariana, los cuales no generaron ningún gasto para el gobierno.
09/2019
• El día 26, pintas en la fachada y golpes en la puerta Mariana valieron 17 mil pesos; en tanto, las pintas del día 28 costaron 17 mil 900.
02/2020
• En febrero de 2020, tras tres ataques los días 10, 14 y 18, golpes a tres puertas y pintas en la fachada representaron un gasto de 44 mil 800 pesos
03/2020
• La intervención por las pintas en la fachada poniente y el portón central realizadas el 8 de marzo costaron 23 mil pesos.
06/2020
• A causa de las pintas realizadas en la fachada norte el día 20 de junio, el gobierno realizó un gasto de 15 mil 300 pesos.
09/2020
• El día 26 de septiembre, las pintas en la fachada poniente y en el portón central provocaron un gasto de 24 mil 500 pesos.