La visita de Salvador Allende en México fue polémica por enarbolar un discurso socialista, ya que, años atrás habían sucedido la masacre de Tlatelolco del 68 y el "Halconazo" en 1971 y muchos jóvenes asesinados que habían defendido hasta la muerte la lucha socialista que a Allende lo había llevado al triunfo en Chile.
El 2 de diciembre de 1972, la Universidad de Guadalajara recibió multitudinariamente la visita del Presidente de la República de Chile, el primer mandatario socialista que llegó al poder por la vía de las elecciones democráticas.
En esa ocasión, el mandatario chileno fue recibido con saludos de bienvenida y después dio un discurso el que dijera que fue el mejor de su vida, en el se manifestó por el compromiso de la Universidad con el pueblo, negó la querella de las generaciones, describió las condiciones de la dependencia y explotación de los países subdesarrollados, y las actitudes de los países poderosos frente a ellos.
“La revolución no pasa por la Universidad y esto hay que entenderlo; la revolución pasa por las grandes masas; la revolución la hacen los pueblos; la revolución la hacen, esencialmente los trabajadores”.
Lo mismo en la propia Universidad de Guadalajara, que en aquellos años estaba liderada por la Federación de Estudiantes, y que se encargó de reprimir todos los movimientos estudiantiles en la casa de estudios con el amparo del gobierno local y del mismo Echeverría.
De modo que, en términos reales, la visita de un presidente socialista a un país y a una universidad bajo esas condiciones de represión, carecía de sentido.
Salvador Allende se despidió de Guadalajara agradeciendo a los universitarios por comprender el drama de su patria, y aseguró que México era amigo de Chile, de su patria.
Aquí puedes rememorar el discurso de Salvador Allende en la Universidad de Guadalajara:
LG