El Senado hizo un llamado a las instituciones públicas del Sistema Nacional de Salud para mantener y en su caso, reforzar los programas de atención psicológica para el personal médico que se encuentra en la primera línea contra la pandemia de covid-19.
Los legisladores advirtieron que además de los riesgos físicos, la emergencia sanitaria ha sometido a niveles extraordinarios de estrés a los profesionales de la salud.
Estos trabajadores, precisaron los senadores, han sido expuestos a largas horas de trabajo, viven con miedo constante a la exposición de la enfermedad, mientras están separados de su familia y se enfrentan a la estigmatización social.
Indicaron que antes del SARS-CoV-2, ya presentaban un mayor riesgo de suicidio en todo el mundo y mencionaron que de acuerdo a un estudio uno de cada cuatro profesionales de la salud ha reportado depresión y ansiedad, y uno de cada tres insomnio durante la emergencia sanitaria.
Además, la Organización Mundial de la Salud advirtió sobre “un alarmante aumento de las denuncias de acoso verbal, discriminación y violencia física entre los trabajadores de la salud, a raíz del covid-19”.
Ante esto “es necesario que este sector conozca el manejo adecuado de pacientes y familiares ansiosos, desafiantes, irritables o agresivos, pues dicho comportamiento se puede dar por sentimientos de frustración, miedo o ansiedad, por malas experiencias previas o por tener culpa relacionada a no acudir ates a recibir atención médica”, añadieron en un punto de acuerdo.
Y esto se manifiesta con un comportamiento exigente, violencia verbal, amenazas y violencia física hacia los profesionales de la salud.
El Senado reconoció que ante la crisis provocada por covid-19 y las complicaciones que provoca en los trabajadores que la atienden, el Estado mexicano ha implementado distintos programas de ayuda para canalizar, diagnosticar y dar tratamiento al personal médico que requiere atención psicológica.
“Por lo tanto, es de vital importancia que dichos programas sean extendidos a todo el país y que, en los estados donde ya existan, sean mejorados, para así preservar el derecho a la salud mental del personal médico lo antes posible”, añadieron los senadores.
LG