El candidato al gobierno estatal de la coalición Juntos Haremos Historia, Ricardo Sheffield Padilla, acudió al Instituto Electoral del estado de Guanajuato (IEEG), y aunque no firmó el Pacto de Civilidad, aprovechó para acusar al gobernador de estar metido en el proceso electoral.
Sentado en medio de las consejeras y consejeros electorales, el candidato de Morena presumió que él siempre se ha conducido con civilidad y en estricto apego al cumplimiento de la ley y “cuando me ha tocado ser autoridad, cumplo y hago cumplir la ley”.
Ahí el candidato, dijo que a quien deben hacer cumplir la ley es al gobernador Miguel Márquez Márquez, “porque es el que no la está cumpliendo y lo he venido señalando con cabalidad”.
También expuso su versión de por qué se está firmando este Pacto de Civilidad que también convocó a los candidatos en la elección del 2015.
Desde su óptica Sheffield Padilla señaló que “este pacto nace a raíz de que asesinan a José Remedios Aguirre, nuestro candidato de Morena y la Coalición a presidente municipal de Apaseo el Alto, un asesinato cobarde y un asesinato político”.
Indicó que en este acontecimiento el procurador general de Justicia del estado, Carlos Zamarripa, quiso “revictimizar a la víctima, con ello victimizando a la familia de Remedios Aguirre, queriéndolo señalar de huachicolero, cuando fue él quien presentó una denuncia más de 2 meses antes de su fallecimiento y quisieron usar su misma denuncia en su contra” acusó.
Después de la extensa argumentación de su no firma, porque no hay lagunas en la ley, reiteró la exigencia al gobernador Miguel Márquez de que brinde seguridad no solo a los candidatos sino a todos los guanajuatenses.