Con la eventual legalización de la mariguana, México infringirá tres acuerdos internacionales que han restringido el consumo de esa droga durante más de medio siglo por considerar que genera dependencia y consecuencias adversas para la salud.
Será el próximo martes cuando el Senado decida sobre el predictamen de ley que contempla permitir el uso lúdico de la droga, aumentar de 5 a 28 gramos la dosis permitida y crear el Instituto Mexicano del Cannabis, entre otros temas.
Actualmente todos los enervantes, incluida la mota, son reguladas por la Convención Única de 1961 sobre Estupefacientes, el Convenio sobre Sustancias Sicotrópicas de 1971 y la Convención de las Naciones Unidas contra el Tráfico Ilícito y el Crimen Organizado de 1988.
En la Convención de 1961, la cannabis se incluye en la lista I, que contiene las sustancias consideradas como la más adictivas y perjudiciales; así como en la lista IV, en donde incluye las pocas sustancias con propiedades particularmente peligrosas y de poca o ninguna utilidad terapéutica, lo que ha sido ampliamente debatido.
Pese a ello, ninguna de las convenciones establece como ilegal las drogas enlistadas ni tampoco se señala con una prohibición expresa o alguna necesidad de tipificar como delito el uso de la mariguana, salvo en la lista IV, aunque son más restrictivas cuando se refiere a la posesión, adquisición o cultivo para consumo personal.
En los seis años recientes ha existido una tendencia a escala mundial para buscar alternativas que contrarresten el creciente consumo de este enervante a través de la legalización de su producción y consumo con fines recreativos.
RECORDATORIO
Frente al debate que se vive en México por la llamada guerra contra el narcotráfico, la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) recordó que las acciones tendientes a la legalización de la mota con fines más allá de los médicos contravienen tratados internacionales.
Al presentar el informe de la JIFE 2018, Raúl Martín del Campo Sánchez, miembro de la junta del órgano internacional, declaró que al adoptar una decisión en el sentido de legalizar la mariguana, esta debe ser informada a la Organización de las Naciones Unidas por contravenir los acuerdos internacionales ratificados por México.
En su reporte, el organismo acusó a Uruguay, Canadá y algunas entidades de Estados Unidos de poner en riesgo los tratados internacionales al abrir la puerta al consumo lúdico de esta planta.
“La aplicación universal y plena de los tratados corre un grave peligro porque algunos Estados parte han legalizado el consumo de cannabis con fines no médicos. Las medidas (…) pueden socavar los tratados. Además, pueden alentar a otros Estados partes a seguir su ejemplo y usarlo para justificar sus propias acciones”, advirtió.
El representante en México de la Organización de Naciones Unidas para la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés), Antonino de Leo, señaló durante su encargo en Bolivia que la legalización o despenalización de las drogas no es una opción en la lucha contra el narcotráfico y las adicciones.
Por el contrario, estimó, esto aumentará considerablemente el consumo de las sustancias hasta ahora controladas por la JIFE, ya que serían mucho más accesibles. A la par consideró que el narcotráfico debe ser combatido como parte de una estrategia global.
Ante el inicio de la discusión en el Senado de una ley que pueda legalizar la mariguana con fines recreativos, MILENIO buscó a la UNODC para conocer su opinión sobre el tema; sin embargo, prefirió no comentar al respecto considerando el momento de la discusión en México.
EL PROYECTO
El viernes pasado MILENIO informó que el gobierno quiere impulsar la producción de mariguana para uso lúdico con recursos de la banca privada y de desarrollo, pues el Senado presentó un predictamen de ley, el cual prevé su producción en el país.
En dicho documento también establecen que las personas indígenas, así como pequeños agricultores tendrán prioridad en el otorgamiento de concesiones y permisos para la producción de cannabis.
Asimismo, se propone crear el Instituto Mexicano del Cannabis, el cual quedará bajo la jurisdicción de la Secretaría de Gobernación, y será el órgano encargado de mediar las concesiones otorgadas.
Entre las negociaciones establecieron que serán aceptados 28 gramos en la portación, que actualmente es de apenas 5, y las personas que consuman mota con uso lúdico podrán tener en sus casas un máximo de cuatro plantas.
EXPERIENCIA INTERNACIONAL. PAÍSES QUE YA OBTIENEN GANANCIAS POR VENTA LEGALIZADA
CRECEN ARCAS CANADIENSES
En menos de un año, las arcas públicas de Canadá recibieron 139 millones de dólares por la legalización de la mariguana, al tiempo que vivió una reducción de 20 por ciento en la producción ilegal de cannabis. Sin embargo, el mercado negro ha tenido su auge ante la limitada presencia de establecimientos que ofrezcan la venta de esta planta y los elevados costos, ya que mientras un gramo en el mercado legal cuesta alrededor de 10 dólares, en la ilegalidad el precio oscila en 6 dólares. Según la Encuesta Nacional de Cannabis, en Canadá hay 4.9 millones de consumidores de esta planta, de los cuales cuatro de cada 10 aseguran recurrir a la ilegalidad para adquirir la droga. La regulación aprobada apenas en junio de 2018 establece la posibilidad de que cada hogar pueda cultivar hasta cuatro plantas y generar productos comestibles para su uso personal, además de que una persona podrá portar en lugares públicos hasta 30 gramos de la droga. Los criterios para su comercialización establecen la necesidad de una autorización por parte de Health Canada para su cultivo y una licencia de la Agencia de Ingresos de Canadá que permita la venta de cannabis. Además, los productos legales de esta droga deberán llevar un sello especial.
EN HOLANDA, TOLERANCIA
Los icónicos coffeeshops en el centro de Ámsterdam se convirtieron desde los años 70 en un punto de referencia internacional sobre el consumo recreativo de la mariguana; sin embargo, el cultivo, la venta y hasta la posesión está prohibida en los Países Bajos. Desde 1976 en Holanda se ha aplicado una política de tolerancia para el consumo responsable de cannabis a través de estos establecimientos en los que a partir de los 18 años se puede adquirir legalmente hasta cinco gramos de mariguana y hachís. La política innovadora de este país implementada con el objetivo de contrarrestar el gran problema que enfrentaban en su momento por el consumo de heroína, parece convertirse en un experimento fallido que hoy exige una mayor apertura. Paradójicamente, en Holanda la posesión y el consumo de cannabis suponen un delito aunque se permite que una persona puede portar hasta 5 gramos sin riesgo de ser procesada, aunque sí será confiscada y en riesgo de ser detenido en caso de que la persona se niegue a entregarlo a las autoridades. Si el gramaje es superior, se considera como uso comercial y conlleva una multa de hasta 3 mil 500 euros; mientras que si la posesión es mayor a los 30 gramos, se considera un delito con una pena de dos años de cárcel.
URUGUAY, EL PRIMERO
La noche del 10 de diciembre de 2013 Uruguay se convirtió en el primer país del mundo en legalizar y regular la producción, comercialización y tenencia de la mariguana con fines recreativos y medicinales bajo el control del Estado. Actualmente más de 47 mil uruguayos acceden de forma regular a una de las drogas más consumidas a escala mundial, su principal vía de acceso son las farmacias que en dos años han vendido 2 mil 875 kilos de mariguana, lo que significó un ingreso para el Estado superior a los 3 millones de dólares. Si bien las farmacias abastecen a 77 por ciento de los consumidores registrados actualmente, la ley 19.172 también permite el cultivo domestico con un máximo de 6 plantas que no excedan los 440 gramos anuales, en el que se estima participan más de 7 mil personas. La tercera vía para acceder a la mariguana de forma legal son los 123 clubes de consumidores que hay en todo Uruguay y que abastecen a 3 mil 417 personas, una vía cada vez más utilizada por la población. La venta en farmacias y los clubes comenzaron a funcionar hasta 2017, tres años después de que logró la legalización, y a través de un registro previo donde los ciudadanos mayores de 18 años deben escanear su huella y declarar su domicilio.
EU, EL EXPERIMENTO
Estados Unidos, el segundo consumidor de mariguana a escala mundial, se ha convertido en 10 años en un experimento peculiar sobre la legalización de esta droga y la pretensión de contrarrestar los altos consumos de esta droga. Si bien a nivel federal la producción y comercialización de esta droga está penado, 11 estados permiten el consumo y producción con fines recreativos, siendo Colorado el primero en abrir la puerta a su legalización en 2012. Hasta ahora Alaska, California, Colorado, Illinois, Maine, Massachusetts, Michigan, Nevada, Oregón, Vermont y Washington ya han despenalizado su consumo, y en 33 estados más su consumo es legal con fines medicinales, lo que genera un mercado de más de 22 millones de consumidores. Solo Colorado ha recaudado en un lustro más de 200 millones de dólares al año por la venta de esta droga, aunque el número de visitas a las salas de urgencia se han incrementado durante este tiempo, así como el número de casos de salud mental que reportan los hospitales. No obstante, hasta 2018 el propio Departamento de Seguridad Pública de ese estado reportó una caída en los arrestos relacionados con la mota en 52 por ciento y 33 por ciento menor de accidentes de tránsito.