En comparecencia ante comisiones del Senado de la terna de candidatas a ministras, la ex subsecretaria de Gobernación, Diana Álvarez, presumió su trayectoria profesional en la academia y afirmó que ella no tiene ningún vínculo partidista o parentesco que pueda afectar su función en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, por lo que sus decisiones serán apegadas a la ley.
Sobre la opinión del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación respecto a la prolongación de mandato del gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, Álvarez Maury dijo que la legislatura local es autónoma para legislar en materia electoral “y se debe asumir hasta que no se haga una resolución definitiva”, pero la SCJN resolverá si el proceso se llevó a cabo apegado a la Constitución.
La aspirante a ministra se pronunció a favor del respeto a los órganos autónomos, del aborto con una aplicación equitativa de la ley, por la defensa del presupuesto del Poder Judicial, la regulación de la cannabis y su despenalización, así como por mantener el sistema de elección de los ministros de la Suprema Corte a partir de una terna enviada por el Ejecutivo.
Sostuvo que en materia de austeridad, el tope al salario presidencial no garantiza que no habrá más corrupción, pero es ejemplo para otros poderes. Pidió que la Corte sea un poder cercano a la gente y no sea un órgano elitista y cerrado, sino que se acerque a la ciudadanía para escuchar qué dice en temas como el aborto, feminicidios y otros asuntos.
Aunque la oposición ha criticado que el presidente Andrés Manuel López Obrador incluyó en la terna a dos mujeres que colaboraron en su gabinete, como la ex titular del SAT, Margarita Ríos Farjat y a la propia Álvarez, que se desempeñó como subsecretaria de Desarrollo Democrático en la Segob, ante los integrantes de la Comisión de Justicia la abogada aseguró que ella ha forjado su propia trayectoria profesional.
“Soy y siempre he sido una mujer profesional, independiente e imparcial, no tengo intereses personales partidistas o de grupo que puedan interferir en mis decisiones. Nunca los he tenido”, aseguró, al ofrecer resolver sin favoritismos.
Señaló que esa ha sido su pauta de comportamiento “y así será siempre. He forjado mi propio camino con esfuerzo, convicción, congruencia en la búsqueda permanente de impecabilidad de la decisión de mi actuación, consciente y con la intención correcta en cada uno de mis actos”.
Diría que México es sin duda un país de leyes, pero también de injusticias, “yo soy una mujer de leyes y dispuesta trabajar y vivir para servirla y al país”.
Al responder preguntas de los senadores, el perredista Miguel Ángel Mancera le cuestionó respecto a la controversia interpuesta en materia de remuneraciones, a lo que Álvarez respondió que debe respetarse el presupuesto del Poder Judicial.
Dijo que a pesar de ser la subsecretaria de Gobernación, ella llega con total libertad a ocupar el cargo, porque no tiene relación personal ni afectiva con los miembros del Poder Ejecutivo y se le invitó al gabinete como parte de la academia.
“Mi relación con el Presidente ha sido estrictamente profesional y estoy tranquila”, insistió, al explicar que a ella le notificó la Consejería Jurídica que había sido propuesta para formar parte de la terna.
Con información de Silvia Arellano
AE