Moisés Méndez Aguilar creció viendo el esfuerzo de su madre por sacar adelante a sus cuatro hijos. Hoy a sus 32 años de edad y de ocupación maquillista busca ser candidato independiente a la gubernatura de Tamaulipas.
Considera que la gente ya se cansó de los partidos y es momento de darle la confianza a alguien del pueblo que los escuche.
Tampiqueño, oriundo de la colonia Esfuerzo Obrero, dice no temerle al reto de reunir 80 mil firmas de apoyo ciudadano en caso que el Ietam le de luz verde.
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“Soy una persona de trabajo, tengo un negocio del área de la belleza, me dedico al maquillaje, tengo 17 años en esto y vengo de una familia honrada, hijo de madre soltera que nos sacó adelante con mucho esfuerzo y sacrificio”.
Comenta que estudiaba la licenciatura en Negocios Internacionales, carrera que dejó inconclusa por necesidad. Actualmente tiene su negocio, vende productos e imparte cursos de maquillaje y peinado profesional.
“Todo empezó en una charla con mi tía y unos amigos, les comenté que deseaba aportar algo a este hermoso estado; durante cinco años la idea se fue puliendo y ahora busco ser candidato independiente a la gubernatura”.
Se define como un aspirante 100% ciudadano que buscará llegar hasta el final con su proyecto, sin declinar por alguien más.
“Nunca he simpatizado con algún partido, yo vengo del pueblo y a él me debo”. Reconoce que no tiene experiencia en la función pública o en la política, pero asegura que sabe escuchar y las mejores propuestas vienen del pueblo.
“El reto es grande pero no imposible. Creo que hay mucho por hacer en turismo y en salud y la gente ya quiere ver caras nuevas y no los mismos, la reforma de 2014 permite abrir estas puertas”.
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El Ietam analiza su expediente luego de presentar su carta intención para participar en los comicios de 2022. De proceder su solicitud, deberá reunir 80 mil firmas ciudadanas.
Uno de los requisitos fue presentar una asociación civil y esta es Jóvenes de Corazón Grande, para apoyar a grupos vulnerables y a las mujeres con necesidad económica, como su mamá, que tuvo que vender gelatinas y flanes, hacer trabajos domésticos y armar shows en fiestas infantiles para sacar a sus hijos adelante.
Moisés Méndez insiste que viene del pueblo y sabe también lo que es tener un pequeño negocio golpeado por la pandemia y sin apoyo gubernamental para salir a flote.
“Sé además lo que es viajar en transporte público y atenderte en Similares, sé lo que cuestan las cosas y lo que es ganarse con el sudor de tu frente lo que llevas a la mesa”, finalizó.
SJHN