Se aprobaron 115 solicitudes para participar como observadores electorales en Tamaulipas, según un informe del INE presentado este lunes en sesión de Consejo General, donde destaca el estado como el segundo con mayor interés ciudadano en atestiguar los comicios del 5 de junio.
En la entidad, uno de cada cinco observadores registrados corresponde a personas de 21 a 25 años de edad, indica el reporte con corte al pasado 3 de mayo. Además de tamaulipecos, pidieron venir a observar los comicios que definirán la sucesión de Francisco García Cabeza de Vaca gente de la Ciudad de México, Coahuila, Jalisco, Estado de México, Nuevo León, Puebla y Veracruz.
El número de observadores electorales aprobados por el INE no aumentó de forma considerable respecto al pasado proceso de revocación de mandato, cuando realizaron esa función 108 personas en la geografía estatal.
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Sin embargo, para el proceso electoral en marcha Tamaulipas sobresale pues fue el segundo estado con mayor número de solicitudes para ser observadores, alcanzando un total de 273. Solo lo superó Oaxaca con 1,173; Hidalgo tuvo 266, Durango 241 y Quintana Roo 111.
De esos 273 que levantaron la mano, todos ellos fueron sometidos a filtros por parte del Instituto Nacional Electoral, quedando 115 en la recta final, el 42.12%. La cifra definitiva podría variar ligeramente, pues el corte del informe es de cuatro días antes del plazo estipulado en la convocatoria.
Según la ley electoral, deben ser ciudadanos en pleno goce de sus derechos civiles y políticos, no fungir ni haber fungido como dirigente de algún partido político en los últimos tres años, ni haber sido candidato a puesto de elección popular en el mismo periodo.
Además debe realizar los cursos de capacitación, preparación o información que impartan el Instituto o las propias organizaciones a las que pertenezcan las y los observadoras electorales.
No obstante, en el caso de la entidad, sólo una organización como tal solicitó su acreditación para observar los comicios, el resto fueron peticiones individuales. Es así como después de haber analizado cada expediente y tomado nota de la participación en los diferentes cursos, se han aprobado 115 solicitudes.
Tamaulipas fue también el segundo estado con más actividades de difusión a la ciudadanía, misma que estuvo siendo invitada mediante diversas plataformas para ser parte de la observación electoral.
De las 2 mil 758 acciones de difusión que realizaron los órganos desconcentrados, Oaxaca reportó 1,616 (58.59% del total), seguido de Tamaulipas con 457 (16.57%), Quintana Roo 186 (6.74%), Aguascalientes 180 (6.53%), Hidalgo 170 (6.16%) y Durango 149 (5.40%).
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Estas acciones consistieron en difusión en redes sociales, publicación de convocatoria, televisión, oficio de invitación, cartel, radio local, invitación telefónica, contacto personal, perifoneo, internet, tríptico, volanteo, correo electrónico, conferencias, pláticas de sensibilización, boletín de prensa y podcast.
Los observadores electorales están facultados por la ley para seguir de cerca y atestiguar los actos de preparación y desarrollo del proceso electoral como la instalación de casillas, el desarrollo de la votación, el escrutinio y cómputo de la votación en la casilla, así como la recepción de escritos de incidencias y protesta, la lectura en voz alta de los resultados en los consejos distritales, la fijación de resultados de la votación en la casilla y clausura de la misma.
Cabe mencionar que las peticiones de acreditación ante los consejos locales y distrales del INE se cerraron el pasado 7 de mayo y se estuvieron haciendo de manera presencial o en línea a través del portal público.
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También el Instituto Electoral de Tamaulipas (Ietam)participó en la recepción de solicitudes para ampliar los canales de recepción y que más gente pudiera sumarse a la labor.
Los observadores tienen prohibido sustituir u obstaculizar a las autoridades electorales en el ejercicio de sus funciones, e interferir en el desarrollo de las mismas.
Asimismo, hacer proselitismo de cualquier tipo o manifestarse en favor de partido o candidato alguno. Externar cualquier expresión de ofensa, difamación o calumnia en contra de las instituciones, autoridades electorales, partidos políticos o candidatos.
Deben abstenerse de declarar tendencias sobre la votación, portar o utilizar emblemas, distintivos, escudos o cualquier otra imagen relacionada con partidos, candidatos, posturas políticas o ideológicas relacionadas con la elección.