El secretario de Recursos Hidráulicos de Tamaulipas, Raúl Quiroga Álvarez afirmó que “se pudo sortear ese apocalipsis que se venía para la zona conurbada”, donde dijo, fue un reto verdaderamente extraordinario superar la crisis hídrica.
“Vivimos realmente un viacrucis, llegó un momento en que más de 800 mil tamaulipecos que viven en Tampico, Madero y Altamira, llegaron a tener cero agua. Se pudo sortear ese apocalipsis que se venía, gracias a la generosidad de los distritos de riego”.
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Expresó que hay buenos pronósticos, y aunque ya pasó la creciente máxima y la cresta fue depositada en los vasos hidrológicos, estima que para el próximo miércoles el sistema lagunario Chairel llegue a un 100% de su capacidad de almacenamiento, “como en los buenos años”, dijo.
El funcionario señaló que desde septiembre del año pasado, en la cuenca del río Guayalejo “llovió cero, prácticamente, cuando desde hace 80 años, ese mes siempre venía al rescate y dejaba el sistema lagunario lleno”.
Mencionó que el 27 de octubre se presentó una precipitación extraordinaria muy importante y levantó el sistema hasta la cota .58, pero se dieron cuenta que 2024 venía extraordinariamente malo y ponía en riesgo el abasto de agua al sur.
Precisó que se aplicaron una serie de medidas extraordinarias, que extendieron el poco volumen disponible al máximo posible, y de no haberse hecho nada, hace tres meses la zona conurbada se hubiera quedado completamente sin agua; aseguró que en esta labor hay héroes anónimos.
“Construimos literalmente una alberca, un tablestacado, porque la laguna se nos fue y tuvimos que estar bombeando al sitio donde está la obra de toma para poderle llevar agua a la ciudadanía, es decir, hubo meses de exhaustivo trabajo que finalmente se pudo concretar para que tuviéramos agua, no al 100%, se tuvo también que llevar isotanques”.
Quiroga Álvarez aseveró que con todo ello, “se pudo sortear ese apocalipsis que se venía para la zona sur” y no hubiera sido posible, subrayó, sin la generosidad de los agricultores de los distritos de riego.
“El primero en mostrar generosidad fue el 092 río Pánuco-Las Ánimas, porque la única avenida que tuvimos en octubre, ellos no tenían agua para sus cultivos, se platicó con ellos, fueron solidarios con la zona sur y dejaron transitar esa avenida libremente y eso hizo que llegaramos a la cota .58”.
Por otra parte, agregó que el río Guayalejo estaba seco en un tramo de más de 40 kilómetros y se acudió al distrito de riego 02 de El Mante, que generosamente puso a disposición el agua de los cañeros para aliviar la sed de la población del sur.
“Hemos pasado una odisea de manera conjunta, y en un acto de verdadero humanismo, nuestros distritos de riego del sur colaboraron al 100% con la población de Tampico, Madero y Altamira y quise iniciar brindando un tributo a este trabajo en conjunto”.
Raúl Quiroga manifestó lo anterior en la ceremonia de honores a la bandera en el polyforum de Victoria, donde estuvieron presentes integrantes de los distritos de riego de la zona sur y funcionarios de los organismos operadores Comapa Sur y Altamira.
Ciudad Victoria tras tormenta
Comentó que antes de “Alberto”, había llovido en los primeros cinco meses del año 45.6 milímetros, y en tres días de ese evento meteorológico y sus remanentes cayeron 178.1 mm, “y el agua sigue llegando”, añadió.
El secretario de Recursos Hidráulicos para el Desarrollo Social, explicó la situación actual de las cuencas hidrológicas del estado tras las recientes precipitaciones.
Detalló que en la cuenca del río Soto La Marina, donde se ubica la presa Vicente Guerrero, se registraron lluvias de 274 mm en tres días, además de la recuperación de los manantiales de La Peñita y de los pozos de la ciudad.
Esto permitirá dotar a la población de Ciudad Victoria con el agua necesaria y superar la larga travesía de más de tres años suministrando gran parte de la ciudad a través de pipas.
“Viene un respiro importante, habrá zonas donde, por falta de infraestructura, tengamos que seguir acarreando agua, pero en general la buena noticia es que Ciudad Victoria vuelve a respirar y a otorgar un servicio de manera normal”, apuntó.
SJHN