La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) continúa en la batalla para posicionar a México en una de las naciones que produzca tecnología espacial. A menos de cinco meses de anunciar el lanzamiento del proyecto lunar de Colmena, ya comenzaron los trabajos de investigación pioneros para mandar la segunda misión mexicana lunar y un satélite, que serán controlados por la inteligencia artificial.
Se trata de Colmena 2, el proyecto lunar que enviará robots orgánicos, “que serán tan funcionales como el ser humano”, pues tendrán la capacidad de adaptarse al terreno lunar, movilizarse sin ruedas, -los primeros en su especie- y podrán recolectar muestras de minerales para ser estudiados por científicos mexicanos.
A diferencia de la primera misión lunar, que se enviará el segundo semestre de este año desde Estados Unidos, los robots de esta segunda edición podrán adaptarse en la noche, se trasladarán autónomamente por toda la superficie lunar y tendrán las capacidades básicas para la prospección y explotación minera.
“Está segunda misión va a tener robots más interesantes y novedosos, que va a desarrollar los recursos para los humanos en diferentes áreas. La idea es tener robots genéricos con capacidad de transportarse, ubicarse, y de sobrevivir. Serán un instrumento para detectar minerales pero también para medir campos de regolitos y campos eléctricos”, adelantó en entrevista con MILENIO, Gustavo Medina, director del Laboratorio de Instrumentación Espacial (LINX).
La UNAM desarrolla también Nanoswai, un satélite controlado por inteligencia artificial que será el sucesor de nanoconnect2, lanzado el año pasado desde la India. Este satélite constará de dos funciones vitales: la primera hacer mediaciones del clima espacial con el cálculo de los efectos permanentes de la actividad del sol, a través de las partículas que se desprenden en el espacio.
La segunda constará de la captura de imágenes, a través de cámaras que portará con la libertad de tomar sus propias decisiones para ordenar y ejecutar una lista de actividades predeterminadas que podrá decidir “cómo implementarlas en la medida de sus capacidades, sin que corra el riesgo de arruinarse” por las condiciones espaciales.
“La misión es que podamos desarrollar una herramienta para que México pueda tener balón propio en el mercado internacional con un trabajo de investigación que tenga una visión en apoyar a la tecnología y a la ciencia en periodos largos”, destacó.
LANAE como centro de desarrollo de ciencia pionera en México
Los proyectos que posicionarán a México en el mundo se desarrollarán en el Laboratorio Nacional de Acceso Espacial (LANAE) ubicado en Hidalgo. El proyecto lunar se prevé que esté listo para el 2025, mientras que el satélite estará listo en 2023. El trabajo será realizado por recursos humanos egresados de la máxima casa de estudios.
Este centro de investigación ya se encuentra instalado en el centro del estado, no obstante su equipamiento se prevé que se realice en septiembre de este año gracias a la liberación de 50 millones de pesos que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) devolverá al gobierno de Hidalgo, para la compra de maquinas que se utilizarán en el laboratorio.
El LANAE tendrá una sede urbana y otra rural. En la primera se tendrán los laboratorios especializados de electrónica, telecomunicaciones, de diseño y arquitectura técnica, de termo vacío, y simulación de cargas electrostáticas en el espacio. Mientras que el área rural se conforma por seis hectáreas destinadas a los trabajos de campo estratosféricos y estaciones terrenas con satelitales de vuelos.
Además, desarrollará las próximas innovaciones en materia de línea de satélite en órbitas bajas así como avances en la exploración lunar y de asteroides con el objeto de incrementar los avances en el sector aeroespacial mexicano.
“La importancia no sólo radica en las dos misiones próximas, sino que ayudara a México tenga el nivel que debería de tener en sector espacial aeronáutico. Para lograrlo se necesita la concentración de esfuerzos, capacidades, visión estrategia y todos los componentes de ese para que exista un pueblo mexicano de desarrollo para estas tecnologías”, precisó.
EHR