Susana fue violada a los 15 años de edad por su hermanastro durante la parálisis que vivió el país a causa del covid-19 en 2020 y, producto de la agresión tuvo un hijo que recién cumplió un año de edad.
La jornada de sana distancia y aislamiento propició, además, que dejara de ir a la escuela y en su hogar viviera una pesadilla.
“Fue como vivir en la cárcel a causa de la pandemia. Luego, resulté embarazada y he tenido que decir que el padre de mi hijo es un amigo, por temor a que me saquen de la casa. Lo peor, es que no supe a dónde acudir para interrumpir este embarazo. Nadie me ayudó. Estuve sola con todo este proceso y tuve a mi hijo a mis 15 años de edad”, dijo la adolescente.
En el Día Internacional de la Mujer, la joven adolescente elevó su voz para exigir acceso integral a métodos de interrupción del embarazo, ya que en México la violencia doméstica, sexual y de género se incrementaron con la pandemia, según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Paula Rita Rivera Nuñez, directora de Telefem, dijo que debido al aumento de embarazos no planificados causados por la pandemia, es fundamental que las mujeres tengan acceso a anticonceptivos y medicamentos para la interrupción legal del embarazo de forma sencilla, con acceso rápido y en total privacidad.
Es importante fomentar la accesibilidad de las mujeres más vulnerables que no tienen recursos dentro de un marco legal que permite la interrupción del embarazo, como una forma de empoderamiento para la toma de decisión en lo que se refiere a derechos sexuales y reproductivos.
Datos del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) señalan que en 2020 la cifra de embarazos no deseados fue de 1.4 millones sobre todo en países en desarrollo, debido a la suspensión de servicios de control de la natalidad y anticonceptivos por causa de covid-19.
De acuerdo con Rivera Núñez, la pandemia puede analizarse desde dos puntos de vista: se observó incremento de la violencia en parejas, aumento de violencia para todas las mujeres en especial, niñas y jóvenes y un aumento de los embarazos por la falta de acceso a servicios de primera necesidad en términos de salud.
En marzo del 2021, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó que la anticoncepción y servicios de salud son de primera necesidad; sin embargo, en México y América Latina, la prioridad se centró en los hospitales covid-19 y por el temor la población dejó de asistir a otros servicios para evitar los contagios y también por la falta de insumos.
La telemedicina forma parte de las herramientas para mejorar el acceso a la salud y a la autogestión de los procesos de salud, como por ejemplo, la interrupción del embarazo.
Telefem es una organización sin fines de lucro que brinda servicio de telemedicina para la interrupción del embarazo de forma legal con medicamentos con la ayuda de profesionales de la salud, quienes ofrecen una atención integral para acompañar la mujer durante todo el proceso.
En Telefem, las mujeres decididas a interrumpir su embarazo con medicamentos, reciben consejería y consulta con un profesional de la salud vía Telemedicina. El servicio está dirigido a toda persona que requiera una interrupción legal del embarazo y en casos donde los embarazos no tuvieron una evolución favorable que requiere una interrupción espontánea y una evacuación hasta la semana 10 de gestación, estas mujeres también pueden acceder al servicio.
La importancia radica en brindar acceso de forma asequible, rápida y clara, donde la mujer sepa que no está sola y tenga la confianza que está frente a un equipo de profesionales.
El mes de marzo abre la posibilidad de abrir el diálogo sobre la atención integral que empodere a las mujeres para su interrupción legal del embarazo, utilizando técnicas de primera elección, sin complicaciones y sin ser juzgadas y estigmatizadas en un marco, seguro, empático y sin prejuicios.
LG