La terraza desde donde cayó el comisionado del INAI, Carlos Bonnin, se encuentra bardeada por una estructura de seguridad metálica de por lo menos un metro de altura.
En un recorrido realizado por MILENIO, se pudo observar que para que el comisionado Bonnin llegara hasta ese punto, ubicado en el quinto piso del edificio, tuvo que caminar en un área habilitada para fumadores y después atravesar jardineras por las que no está permitido el paso.
“Para fumar están las banquitas. La gente no fuma ahí en la orilla. Es más, está prohibido y más atravesar por las plantitas”, dijo un empleado del lugar que prefirió el anonimato.
La valla metálica que rodea la terraza del INAI tiene una altura de al menos un metro y a una persona con una estatura de 1.70 le llegaría por arriba de la cintura, muy cerca del tórax.
Datos preliminares de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México apuntan a que no hubo fuerza externa que haya provocado la caída del comisionado.
Videos captados por cámaras de seguridad del inmueble captaron al comisionado Bonnin mientas hablaba por teléfono.
De acuerdo con el expediente del caso, registrado bajo el número CI.FCY/COY/-1/CFD4398/11.2018, en el video, a las 08:38 horas se aprecia que brinca unos arbustos y se pierde la visión.
El funcionario murió en un hospital del sur de la Ciudad de México, a donde fue trasladado de emergencia tras caer de la terraza.
La primera versión que manejó Francisco Javier Acuña, comisionado presidente del INAI, fue que Bonnin murió tras sufrir un infarto.
Un día después, Acuña aceptó que la muerte de Carlos Bonnin Erales ocurrió luego de que cayera del edificio.
Ayer, la Procuraduría capitalina confirmó que el deceso se debió a las lesiones causadas por el accidente y no a un infarto como informó el INAI.
OVM