La violencia que vive la tierra caliente, Michoacán, repercutirá en los bolsillos de cientos de familias debido a la perdida de miles de hectáreas de alimentos básicos que se cosecha en la región.
Juana Francisca, agricultora y habitante de Tepalcatepec, señaló que, conforme el ejército recupera los poblados que estaban bajo control del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), se podrá conocer con exactitud del numero de hectáreas pérdidas.
“Lo que está prácticamente perdido es la siembra de otoño-invierno, que es el sorbo, el maíz, pero lo que más nos duele ahorita, por el precio, es el cultivo de limón que no se ha podido cosechar porque ese también se pierde, se cae y se pierde, está muy bueno el precio pero ahorita no se puede ir a cosechar” denunció Juana francisca, agricultura de Tepalcatepec.
En Tepalcatepec, se estima que entre cinco y seis mil hectáreas de limón se dejaron de cosechar por agricultores amenazados por el narcotráfico, a esto se suman las cosechas de sorbo, pepino, mango y papaya que corrieron la misma suerte.
Aunado a esto, agricultores del valle de Tepalcatepec denunciaron el robo de maquinaria de siembras.
"La problemática qué es la maquinaria que contaba la gente fue robada, la gente está llegando a su rancho no hay tractores, no hay rastros, no hay nada. ¿Cómo van a trabajar la tierra? No se va a poder y, entonces, se pone muy complicado, ¿cómo con dos o tres factores? No nos alcanza”, exclamó Juana Francisca.
La cosecha del temporal primavera-verano también está en riesgo, debido a que se tienen escasos dos meses para preparar la tierra para los nuevos cultivos.
“Lo que es papaya, limón, la caña de azúcar, por ejemplo, se va a poner muy cara la azúcar, precisamente por eso, aunque digan: 'Ay, es poquito', no, son casi seis mil hectáreas de caña de azúcar que se siembran aquí en Tepalcatepec”.
Los afectados hacen un llamado al gobierno federal para que los apoyen con programas para reactivar el campo.
“Les agradecemos mucho a los del gobierno por el envío del ejército, pero necesitamos apoyos económicos para reactivar el campo y la economía, porque de lo contrario la situación se pondrá peor”, agregó Juana Francisca.
Otro problema que enfrentan los campesinos es que muchas parcelas tienen minas terrestres colocadas por los narcotraficantes.
Las más de 20 comunidades abandonadas por la violencia podrían quedar parcialmente solas debido a que muchos habitantes pidieron asilo político en Estados Unidos o huyeron a otros estados, lo que complicará la mano de obra en el campo.
La gente pide al ejercito que no se vayan, que siga en la zona vigilando para evitar que el CJNG regrese y, con él, la violencia.
Mientras tanto, el ejército sigue ganando terreno en Tepalcatepec, y conforme avanzan los días, los sicarios del CJNG se van replegando rumbo a Aguililla.
EHR