En Yucatán pensamos que la paz la podemos construir cada uno: Vila Dosal

Roma, París, Barcelona, Chicago, Bogotá y ahora Mérida es sede la 17 Cumbre Mundial de Premios Nobel de la Paz que reúne por primera vez a 30 laureados, quienes abordarán temas como el desarme nuclear, la responsabilidad de los medios globales en la preservación de concordia, así como el empleo de las redes sociales para la construcción de la armonía.

En entrevista, luego de la inauguración, el gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, habló no sólo de la importancia del encuentro para la ciudad, sino para México.

¿Cómo plantearía la importancia de esta cumbre para Yucatán y para México?

Estamos muy contentos de hacer este evento, ya que es el más importante para la construcción de la paz a escala mundial y hoy somos sede. Tanto para la ciudad de Mérida como para todos los yucatecos es un orgullo muy grande.

Es un evento que anteriormente se ha realizado en Roma, París, Barcelona, Chicago, Bogotá y ahora en México, en Mérida. Para Yucatán, podría decir, es el evento internacional más importante en su historia, pues nunca antes, ni siquiera en Ciudad de México, se habían reunido en un mismo evento 30 ganadores del Premio Nobel de la Paz.

Estamos hablando de una cifra récord en la realización de estas cumbres, los más que habían asistido eran 28 y hoy tenemos 30 ganadores de premios Nobel de la Paz, eso habla no solamente de la importancia del evento, sino del interés que ha generado.

Entre las cosas para seleccionar a Mérida como sede del encuentro está la situación de la violencia en general que se vive en el país, la ciudad es una muestra de que no todo está mal, que ha paz dentro de México.

Sí, por supuesto, ser seleccionado como sede es todo un proceso. Parte de lo que llamó la atención es lo que comentas. Decían: “Oye, cómo en un país donde se oyen muchas cosas sobre el tema de la seguridad, Yucatán es uno de los lugares más seguros, no solo de México, sino del mundo". Eso es lo que muestran los indicadores y nosotros quisimos ponerle nuestro sello, por eso la cumbre se llama "Mi Huella por la Paz".

Normalmente esperamos que la paz la construyan los grandes líderes, los grande organismos internacionales y aquí, en Yucatán, pensamos que la paz la podemos construir cada uno de nosotros con nuestras acciones desde nuestra casa, en nuestra colonia, en nuestra ciudad, en nuestro estado; es esa suma de acciones que hacen la diferencia, y eso es lo que queremos aportar en esta cumbre.

Bien dicen, muchos de los laureados, que la paz se logra por dos partes ¿En este caso sería, por un lado los líderes, y por otro, los ciudadanos haciendo lo que les corresponde?

Sí, nosotros estamos conscientes de que las autoridades tienen que ver mucho en el tema de la construcción de la paz, pero nosotros como ciudadanos siempre tenemos que dar nuestro mejor esfuerzo para que las cosas salgan bien. Los pequeños cambios que podemos hacer en nuestra propia casa, en nuestra propia colonia, organizándonos con nuestros vecinos, pueden hacer una gran diferencia para nuestro entorno cercano. Esa pequeña suma de buenas acciones es lo que al final termina haciendo de una ciudad, o de un estado, un lugar seguro.

¿Alguna recomendación desde Yucatán para el resto del país para lograr ciudadanos más tranquilos, sobre todo para que logremos un país sin violencia?

No soy nadie para hacer recomendaciones, la realidad es que cada estado tiene una dinámica diferente. Yucatán no es un caso excepcional, lo que creo es que aquí lo más importante es que, de manera individual, tengamos buenas acciones, confiar en nuestras autoridades y que ellas se ganen esa confianza; creo que ese trabajo es lo que más resultados puede dar.

Si algo funciona en Yucatán es que la ciudadanía confía en sus autoridades. Tenemos un alto número de denuncias todos los días, recibimos más de 4 mil 500 llamadas al 911 y atendemos todas las llamadas por insignificantes que sean, porque eso es lo que refrenda la confianza.

¿Qué quiere el gobernador que se quede de esta cumbre, cuál sería el eslogan para que se quede?

Lo que nos han dicho todos los laureados, algunos ex presidentes, algunos fueron ex primer ministros, es que cuando vieron una injusticia, no voltearon a ver para otro lado, se mantuvieron firmes, soportaron amenazas de muerte, que les quitaran su patrimonio, que encarcelaran a sus familiares; sin embargo, ellos siempre tuvieron la convicción de ayudar.

Lo que debemos aprender todos es que, cuando veamos una injustica, no hay que quedarnos ni parados, ni voltear a ver a otro lado. ¿Cómo podemos hacer que esa injusticia sea revertida? ¿Cómo podemos ayudar a los demás? ¿Cómo podemos ver a todos como si fueron nuestros propios hermanos sin importar el color de nuestra piel o cualquier tipo de preferencia?

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​OVM