El Plan Sectorial de Salud Mental y Adicciones 2023–2024 “llegó tarde, pero llegó”, requiere de una normatividad y no se apegará a los mandatos emitidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), aseguró Jorge Alcocer Valera, secretario de Salud.
“Sí, algunos algunos de ustedes piensan, o cuando menos yo, que el lanzamiento del Plan Sectorial de Salud Mental y Adicciones llegó tarde, pero llegó. Y es solo uno de los varios ejemplos de lo que podemos hacer y sus avances en miras de unificar el sistema fragmentando, y atender a todos y a todas que más lo necesitan, que son las personas sin Seguridad Social”, dijo durante la presentación en el Instituto Nacional de Geriatría.
Ante autoridades del IMSS, ISSSTE, Sedena, Semar, y de la recién creada Conasama, Alcocer Varela también dejó en claro que requieren de una normatividad que homogeneice las intervenciones a los pacientes, asimismo que todas la acciones se apliquen considerando la experiencia mexicana.
El secretario declaró que no se van a integrar los programas que sean mandatos de la OMS a cualquier país. Solamente se van a crear con cierta guía, con cierto ejemplo, "pero esta debe ser una una actividad mexicana para mexicanos”, detalló.
“Tenemos que contar también con el marco normativo, ahora que están las normas en una licuadora y que no sabemos qué va a salir de ese producto, pues hay que ver que tenemos esa necesidad, también, de normar hacia delante y no nada más representando el interés algunos esa normatividad (en alusión a los intereses de las empresas)”.
Y con ello, continuó, que se van a lograr las bases para proteger a la población, asegurando el acceso a la salud a la que todos tienen derecho. “He oído que se planea consolidar en cada institución una estructura a través de la famosa normatividad definida, que garantice la implementación de acciones que generará el bienestar que la población mexicana requiere”, añadió dejando en claro que ningún programa será dictado por la OMS.
Alcocer Varela también dimensionó el incremento de las adicciones y enfermedades mentales, sobre todo durante la emergencia sanitaria por covid-19.
“En el 2022, las principales causas de atención por sustancias fueron las metanfetaminas, con 46 por ciento de los casos; alcohol, 25% y cannabis 13.3%.
“En cuanto al fentanilo, ese mismo año, se atendieron 331 casos por consumo, duplicando la cifra de atención que en 2021 fue de 184”, aseveró.
La estrategia nacional contra las adicciones “Juntos por la Paz” articula el trabajo para dar solución a la situación de inseguridad y violencia en el país en conjunto con las dependencias de la secretarías de estado y de las 32 mesas de coordinación estatal, así como de más de 330 municipios, para fortalecer la reconstrucción del tejido social.
Se trata de prevenir las adicciones a través del deporte, la cultura, la salud, seguridad.
El secretario de Salud mencionó que del 2019 al 2022 se han beneficiado a más de 25 millones de personas a través de más de 2 millones de actividades preventivas y comunitarias, “para prevenir el consumo del fentanilo y drogas químicas, se está trabajando en forma intersectorial y a paso veloz”.
Por su parte, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo mandó un mensaje donde recordó que el 2022 se otorgaron 818 mil consultas de primera vez de salud mental y también de adicciones entre adultos de 20 años y más, también hubo 94 mil consultas a menores edad.
“Con todos estos datos aún no es suficiente, recordemos que en México tres de cada 10 personas padecen un trastorno mental a lo largo de su vida y más del 60 por ciento de la población que sufre alguno de ellos no recibe tratamiento alguno”.
En la presentación se habló de la importancia de desarrollar capacidades entre el personal de primer nivel de atención para intervenir a tiempo.
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SCZ