Aunque como método de curación tiene antecedentes ancestrales, la fisioterapia es una disciplina que hasta hace pocos años se elevó a rango profesional al ser incluida entre las ciencias médicas. Si bien, en el imaginario popular prevalece la idea de que esta profesión se trata de dar masajes… Y el masaje es sólo una técnica más de la que se vale el fisioterapeuta para tratar padecimientos en apoyo a diversas especialidades médicas: desde traumatología y ortopedia, hasta urología y ginecología, pasando por la medicina deportiva y la rehabilitación postquirúrgica.
“La fisioterapia una disciplina de la salud que ofrece una alternativa terapéutica para mejorar las funciones motrices y paliar los síntomas de muchas dolencias, tanto agudas como crónicas. Es por eso que la fisioterapia es referente en la rehabilitación física no sólo en los deportistas sino en cualquier persona que, debido a una enfermedad o trastorno, tenga problemas de movilidad”, sostuvo Irene López Tauler, fisioterapeuta y directora académica de la Licenciatura en Fisioterapia en el Instituto de Estudios Universitarios Amerike, en Guadalajara.
En entrevista con este medio, la fisioterapeuta egresada de Escuela Universitaria de la Salud y el Deporte (EUSES) en Cataluña, España, compartió que el campo de acción de la fisioterapia es muy amplio y se centra en recuperar la funcionalidad, la movilidad y reducir dolencias. “Lo que hacemos se simplifica de esta manera, pero la fisioterapia tiene cabida prácticamente en cualquier patología, pues auxiliamos desde a recuperarse al 100 a una persona hasta aliviar los síntomas”.
López Tauler quien se ha especializado en uro-ginecología y reeducación postural, ejemplifica con dos situaciones: por un lado la tortícolis, una de las dolencias más comunes del ser humano, derivada generalmente de una mala postura al dormir. “El fisioterapeuta puede hacer todo el proceso, desde la valoración, hasta prescribir el tratamiento, aplicarlo y que esta persona se recupere al 100 por ciento”. En el otro extremo, los pacientes que por cursar con una etapa terminal por una enfermedad o por vejez deben estar encamados. “En este caso no podemos recuperar la funcionalidad pero mediante diversas técnicas de movimiento, cambios posturales, masajes, ejercicios físicos y respiratorios, vamos a poder mejorar su calidad de vida”.
Aun cuando se trate de una enfermedad que requiera atención farmacológica o quirúrgica, su intervención es importante para la prevención de lesiones, tanto como para maximizar el tratamiento quirúrgico o potenciar la rehabilitación postquirúrgica del paciente, refirió López Tauler. “De todas las especialidades médicas, la fisioterapia siempre tiene algo que aportar, no tenemos una varita mágica pero siempre podemos aportar algo, desde reumatología a neurología y de paciente pediátrico a adultos mayores”.
Los masajes son sólo una de las técnicas que se usan en Fisioterapia para tratar al paciente. “Podemos tratarlo mediante masajes, ejercicios, estiramientos, aplicaciones de agentes físicos como electroterapia, hidroterapia… el abanico de posibilidades es muy amplio, dependiendo lo que presente el paciente”, señaló.
Irene López destaca que esta profesión está vinculada a las ciencias médicas y se enfoca a las circunstancias y necesidades de cada paciente. “La fisioterapia siempre tiene algo que aportar… Un fisioterapeuta puede adaptar su terapia tanto a la enfermedad, es decir, según el trastorno o molestias que presente la persona es como se seleccionan los mecanismos con los cuales trabajará el fisioterapeuta.
Refirió que de acuerdo a sus características, un paciente puede tolerar un tipo de técnicas, pero no pueda someterse a otras. “Por ejemplo, para cierta patología se puede trabajar con hidroterapia, pero si el paciente está en cama, eso es imposible. Se tiene que adaptar a esa realidad y buscar otras alternativas de tratamiento”.
Otro aspecto a tomar en cuenta son las cualidades del propio fisioterapeuta, quien puede tener más afinidad hacia determinadas técnicas terapéuticas, lo que va especializándolo.
De acuerdo con Irene López, actualmente, en el sector salud existe una alta demanda de fisioterapeutas, con el fin de ayudar a personas a recuperarse en centros de rehabilitación, hospitales, clubes deportivos, centros de atención infantil, centros geriátricos y albergues de la tercera edad, clínicas para personas con discapacidad e incluso brindando atención en consultorios privados y a domicilio. “Incluso la participación del fisioterapeuta puede entrar dentro de la administración pública planeando programas de prevención de ciertas enfermedades que estén relacionada con el área de la fisioterapia, y, cuando ya se tiene cierta trayectoria también puede trabajar en el área administrativa, docente y de la investigación en el área de las ciencias de la salud”.
Casos: de incontinencia a ciática
La incontinencia urinaria que presentan mujeres tras uno o varios partos es una de las afecciones que pueden corregirse mediante la fisioterapia, incluso sin necesidad de someterse a una intervención quirúrgica. Esto, refirió la entrevistada, a partir de un tratamiento de ejercicios para la base pélvica. “La pelvis es como una hamaca muscular que después de varios partos queda debilitada y surge la incontinencia urinaria… que muchas mujeres esconden porque creen que es algo normal ‘porque ya fuiste mamá’ y no es normal, es un estado patológico”.
Otro caso es el dolor de la ciática. Una molestia intensa en la parte baja de la espalda, que lleva a muchas personas al quirófano. Este dolor es causado por la irritación de uno de los nervios espinales en la parte inferior de la espalda y normalmente se extiende al glúteo y la pierna. Y comúnmente afecta en un solo lado del cuerpo. Los síntomas pueden incluir entumecimiento, hormigueo o debilidad.
La fisioterapia puede ser una alternativa de tratamiento para la ciática, a través de una rutina de estiramientos para mejorar la flexibilidad, ejercicios para fortalecer y acondicionar los músculos que sostienen la espalda y técnicas para controlar el dolor.
La entrevistada precisó que con frecuencia el abordaje de pacientes es integral, una vez que el médico especialista prescribe el tratamiento de base y refiere a otros profesionales, entre ellos el fisioterapeuta para atención previa a un cirugía o postquirúrgica o bien, para evitar una cirugía.
López reconoce que hay pocos buenos fisioterapeutas y “se requiere abrir el campo a estos nuevos profesionales, cuya labor es poco conocida por la sociedad y realmente aportan muchísimo: entre sufrir de incontinencia urinaria desde los 40 años a no sufrirla la diferencia es enorme, te puede cambiar el resto de tu vida y al día de hoy se ignoran las alternativas de tratamiento”, por lo que invitó a indagar con su médico de confianza.
Claves
¿Qué es la Fisioterapia?
La fisioterapia es una disciplina de la salud que ofrece una alternativa terapéutica para tratar los síntomas de múltiples dolencias, tanto agudas como crónicas.
El fisioterapeuta es el profesional de la salud que se forma con conocimientos de nivel universitario en anatomía, fisiología, neurología, traumatología, ortopedia y biomecánica. Requiere de preparación científica y de competencias para valorar, entender, analizar y tratar las alteraciones de la salud a las que se pueda dar respuesta desde la fisioterapia.
El título universitario de licenciado en Fisioterapia requiere 4 años de estudios después del bachillerato.
¿Cómo elegir a un buen fisioterapeuta?
Buscar un profesional con recomendación del médico de base (general o especialista)
Fuente: Irene López Tauler, fisioterapeuta y directora académica de la Licenciatura en Fisioterapia en el Instituto de Estudios Universitarios Amerike, en Guadalajara.
SRN