Al menos la mitad de las muertes registradas por el nuevo coronavirus en los municipios de la Zona Metropolitana de La Laguna corresponden a personas sin ninguna comorbilidad previa.
Según el Sistema de Información Geográfica COVID-19 de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), del primero de marzo del año pasado al 26 de febrero de 2021 suman entre las cuatro ciudades 2 mil 238 muertes, siendo mil 162 al escenario de no enfermedades crónicas y que equivale a un 51. 9 por ciento.
En Torreón es donde un 64.1 por ciento de los mil 305 fallecimientos estaban en esas condiciones. En el caso de Gómez Palacio, 246 de las 689 personas que perdieron la vida estaban sanas, es decir, un 35.7 por ciento. Matamoros, por su lado, lleva un registro de 146 defunciones hasta el 26 de febrero y de las cuales 35.6 por ciento tienen que ver con personas sin comorbilidades. En Lerdo, un 27.6 por ciento de las 98 defunciones.
Por entidad federativa en Coahuila la plataforma da cuenta de 5 mil 654 muertes, siendo el 39 por ciento que corresponden a personas sin enfermedades crónicas. En Durango se tiene el conteo de 2 mil 84 fallecidos, de los cuales el 25 por ciento están en esas condiciones.
El Sistema de Información de la UNAM precisa que en el país el promedio de personas sin comorbilidades que perdieron la vida son un 60 por ciento del total, estando Torreón por encima de esa media.
¿Qué provoca que personas en esencia sanas tengan las complicaciones que las llevan a la muerte por covid-19? Hasta la fecha no hay estudios concluyentes sobre el virus, pero especialistas médicos consultados por MILENIO sugieren algunos factores.
“Quiero pensar que deben ser varios factores que ponen susceptible a ese paciente y algo que puede influir es el estado emotivo, el tipo sanguíneo y lo más importante también es tener conciencia de atenderse al detectarlo”, expone Alberto Salas Cepeda, representante médico en la Mesa de Salud en La Laguna.
Indica que si bien la enfermedad tiene diferentes caras de presentación clínica algo que puede influir en un desenlace fatal tiene que ver con falta de atención oportuna de los síntomas respiratorios.
“La clave que encontramos es no permitir que el virus cause un proceso inflamatorio porque difícilmente lo vas a revertir, pues si un paciente llega con una oxigenación abajo de 82 se te va complicar a terapia, alto flujo de oxígeno y luego a tubo”.
Martha Alicia Romero Reyna, directora Prevención a la Salud en Coahuila, coincide y detalla que en esta entidad una cifra cercana al 40 por ciento de las defunciones tiene que ver con personas sin padecimientos crónicos previos.
“En unas personas menores de 40 sí hemos visto que tienen una enfermedad crónica y otros que no, pero su llegada o atención en el hospital fue tardía. No hay un tratamiento establecido”.
Aprendizajes a un año de la pandemia
La llegada del coronavirus a La Laguna cumple un año a finales de febrero. Fue el día 29 de ese mes en 2020 cuando se detectó el primer caso en una mujer de 19 años de edad que previamente había viajado a Italia.
Desde entonces la vida de la región, los estados de Coahuila y Durango, así como el país entero no ha sido la misma. En la Zona Metropolitana se ha transitado por diversas fases del semáforo epidemiológico y llegado a más del 90 por ciento de la ocupación hospitalaria, aunque en el presente no se alcanza ni el 30 por ciento y ya empezó el tan ansiado proceso de vacunación que, aunque va lento, representa una esperanza.
Martha Alicia Romero afirma que desde hace un año el sector salud ha tenido una serie de aprendizajes amplios que comenzaron con identificar la sintomatología de los infectados por covid-19, la determinación de sus altas médicas y el establecimiento de diversos protocolos para poco a poco reincorporar a diversos sectores a una normalidad regulada.
Aunado a eso, refiere que la implementación de diversas medidas como el uso obligatorio de cubrebocas, el lavado de manos y la sana distancia han permitido una presentación marginal de otras enfermedades respiratorias.
“Creo que todas las acciones de sana distancia y lavado de manos han permitido que no se presenten otros padecimientos, pues no hemos tenido casos de influenza”.
La funcionaria advierte que la normalidad que conocíamos no volverá como tal, pues aunque conforme transcurran los meses y se recuperen actividades, seguirán diversas medidas restrictivas.
“¿Cuándo volveremos a estar en una normalidad? Va tardar y vamos tener que mantener todas estas medidas de protección en el hogar y los lugares de trabajo”.
El representante médico en la Mesa de Salud de La Laguna, Alberto Salas Cepeda, opina de manera similar y agrega que la vacuna será clave para avanzar sin dejar de lado las diferentes medidas restrictivas que no se deben relajar.
“No tenemos un medicamento concreto contra el virus y la esperanza es la vacuna. Hacemos mucho énfasis en que la gente no se confíe por eso, aunque ahorita tenemos la incidencia más baja en lo que va del año. Creo que la comunidad ya lo toma más en serio a base de tragedias en las casa y por eso nos costó mucho”.
Durante el primer año de la pandemia uno de los temas que más llamó la atención fue la aplicación de pruebas para su detección, siendo las de tipo PCR las ideales para ello y que en un comienzo pocos laboratorios tuvieron la capacidad para ello.
Por parte del gobierno del estado de Coahuila y la iniciativa privada se montaron diversos espacios para dicho propósito que consiguió un enfoque metropolitano y causó polémica debido a que saltaron a la vista molestas de que no se hacía lo mismo en Durango.
Datos obtenidos vía transparencia en la Secretaría de Salud coahuilense revelaron que en total para la Región de La Laguna fueron aplicadas 40 mil 599 pruebas PCR, de las cuales 39 mil 763 corresponden a habitantes de los cinco municipios de la Región Laguna.
El que encabeza la lista es Torreón con 27 mil 413, seguido por Francisco I. Madero con 5 mil 285, San Pedro con 4 mil 814, Matamoros con 2 mil 30 y Viesca con 221. Además de eso, 836 pruebas fueron aplicadas a pobladores de seis municipios del vecino estado de Durango. Gómez Palacio tiene más con 572, después Lerdo con 200, Tlahualilo con 17, Nazas con tres y Mapimí con una.
Llama la atención que la Secretaría de Salud da cuenta de que también se aplicaron 43 para personas cuyo domicilio corresponde a la capital de Durango.
Jóvenes, los favoritos de contagio
La población joven ha sido la favorita para diseminar el virus del covid-19 entre la población de la Zona Metropolitana. Así lo indican los datos capturados diariamente por el Consejo Cívico de Instituciones de La Laguna.
“Queda claro y es evidente que vemos un mayor contagio en los rangos de edad de 15 a 34 años, principalmente mujeres en la Zona Metropolitana. Sin embargo, cuando cruzas esta información por las comorbilidades, las personas más adultas son propensas a que se complique el daño y tengan que fallecer”, expone Marco Zamarripa, director del organismo.
Precisa que uno de cada tres contagios corresponden a esta población, mientras que de 6 o 7 de cada 10 a las personas fallecidas a laguneros cuyas edades superan los 55 años. Cabe precisar que el análisis corresponde a datos que el organismo obtuvo de parte de las secretarías de Salud en Coahuila y Durango.
CALE