A un año de la primer muerte por meningitis en Durango, familiares aún viven el luto y piden justicia

En el recuento de los daños, 41 personas perdieron la vida, 40 mujeres y un hombre; además quedaron 83 huérfanos.

Meningitis en Durango. (Archivo)
Gilberto Lastra
Durango, Durango /

Este primero de noviembre se cumple un año del primer fallecimiento por meningitis micótica, donde 41 personas perdieron la vida, 40 mujeres y un hombre; además, como resultado de las muertes quedaron 83 huérfanos, de los cuales 76 son menores de edad.

Fueron 80 las personas infectadas tras contagiarse de un hongo mientras se realizaban intervenciones quirúrgicas en cuatros hospitales de Durango capital. Entre ellos, el Hospital del Parque, donde se registraron 36 fallecimientos, principalmente por cesáreas.

A un año de distancia de la crisis de salud, los estragos de la tragedia se convierten en historias de amor entre los familiares de los fallecidos. A su manera afrontan la realidad de esa muerte, pero con un halo se fortalece por lo vivido.

Por la parte oficial se habla de que el proceso legal sigue en curso, según los tiempos que la ley permite, aunque las víctimas desean justicia más ágil, pero los tiempos son los correctos según la ley, además que todos los involucrados de los hospitales se encuentran detenidos. Además que hay casos donde se alcanzó un acuerdo reparatorio.

"Que no se olvide ninguna", sobreviviente

Evelyn Arrieta, sobreviviente de meningitis, habla que es un tema que no se debe de olvidar, incluso, si ella hubiera muerto, no desearía que se olvidara esta temporada oscura, donde la amistad con la otras pacientes, algunas que no sobrevivieron, se convirtieron en familia.

Pero deja en claro, que el daño va más allá del dinero, y de los apoyos que se llegaran a dar.

“Si a mí me hubiera tocado estar en esa lista, no me hubiera gustado que dejaran esto como el ‘ya pasó’ porque son muchos niños huérfanos. Muchas cosas que mueven los sentimientos. Ahora que estoy conviviendo directamente con ellos, me doy cuenta que ese vacío no se va a llenar con nada, y no hay cómo enmendar el daño que se hizo. No hay forma, ni con dinero ni con despensas”.

Pero a pesar que ya ha pasado tiempo y que no fueron dadas de alta tras estar hospitalizadas por meses, el miedo persiste, los altibajos de la infección siguen siendo un temor importante en el día a día. Ese temor no las hace olvidar, como ella pide que no se olvide lo sucedido.

“Muchas vamos a tener el miedo de si el hongo regresa. Pero, de todas formas, creo que una forma bonita es recordarlas. Creo que no deberíamos de olvidar todo esto que pasó porque fue creo un impacto fuerte para Durango y ha sido muy complicado para todos".

Evelyn acompañó a sus compañeras durante la estancia en el Hospital 450, caminaba por los pasillos para saludarlas y confortarlas, porque ella siempre ha mostrado su agradecimiento por el trato durante su estancia clínica, además, por la solidaridad que guarda con las demás pacientes.

“Ha sido un año muy complicado, hace ya un año ya estábamos enfermos, de alguna u otra forma estábamos padeciendo, un poco más, todo lo que estaba sucediendo. Es un año complicado porque se han marchado 41 víctimas, que en su mayoría son mamás que dejaron a sus hijos. Que hay muchos temas que se pueden hablar de muchas cosas inconclusas, pero dentro de todo, de alguna u otra forma agradezco el estar aquí como siempre lo he agradecido. Últimamente he recordado a mis compañeras fallecidas”.

"Es el vivo recuerdo de su madre", viudo de víctima por meningitis

Kairen, se ha convertido en el soporte de su padre Abraham Hernández, viudo de Aniri, una de las 41 víctimas de meningitis micótica en Durango.

Aunque no es sencillo, porque el amor por Kairen es el dolor por Aniri, lo dice mientras llora un poco, pero sonríe, porque el mismo decidió afrontar con valor todo el proceso, y ahora lo importante es ser un buen padre para la menor.

Lo cotidiano lastima, el hacer cosas comunes como el llevar a Kairen a la guardería duele, el recogerla, el cuidarla al enfermar también porque falta Aniri, cuando ambos decidieron acompañarse y ahora ella no está.

“El hecho de llevar a la guardería a la niña, el no llevarla acompañado de mi esposa Aniri, me duele mucho. El recoger a la niña sólo, simplemente. Hace días se enfermó la niña y llevarla al médico, las noches de desvelo, sólo, porque, si tengo gente que me respalda, pero a final de cuenta mi niña y yo somos la familia. Y somos ella y yo un equipo, donde tenemos que apoyarnos ella y yo. Es muy difícil no tener a su mamá y a mi esposa”.

Y a pesar que han pasado ya seis meses desde la muerte de Aniri, lo mundano de los trámites de gobierno, o asuntos legales, lo hacen recordar por lo que pasaron, porque Aniri fue de las mujeres que más tiempo pasó en el hospital hasta que su cuerpo no resistió más.

A casi seis meses del fallecimiento de Aniri, el estar haciendo papelería de trámites burocráticos, te duele. No es tan fácil. Es muy complicado salir adelante”, reconoce y es el momento que se quiebra su voz.

Y a pesar del dolor que vive Abraham en este momento, el futuro que avizora es de felicidad con su pequeña. Y es que a pesar de las dudas que pueda tener, “veo futuro feliz con mi niña, nunca olvidaré y nunca enterraremos el recuerdo de Aniri, jamás, siempre va a estar presente en nuestra mente y en nuestro corazón. Yo no sé todavía como hablarme a mi niña de esto, porque mi niña, le preguntas donde está su mamá y señala al cielo”.

Indemnizaciones y juicios de responsables

Por su parte, David Payán, quien es el encargado del tema atención a las víctimas de meningitis y sus familiares, reconoce que no es sencillo el lidiar con el dolor de la gente en medio de una crisis de salud.

Explicó que en la parte médica se encuentra controlada, pero todavía hay tres pacientes que reciben tratamiento ambulatorio por horas. Con alergia se encuentran dos casos más.

“Ya la gran mayoría de las 39 sobrevivientes, están estables, sin secuelas cogintivas, emocionales, pero al menos clínicamente, hasta donde nosotros vemos a alguna pacientes grave o internada. Por la parte clínica estamos con cierta tranquilidad. No quiere decir que con esto relajemos las medidas de todas las pacientes”.

Por la parte de los apoyos, según las versiones del entrevistado, se siguen entregando tanto pañales como leche, y no se detendrá hasta que no se tenga otra indicación, y el tema de las becas que se les ofrecieron en meses pasados, ya se entregan a los menores, aunque no en el tiempo que se esperaba. Actualemente 10 familias ya cuentan con el apoyo, y se seguirá en la espera de todas las becas.

En el tema de la justicia, reconoce que las víctimas y los familiares esperan que se dé a la brevedad un veredicto, pero los juicios se encuentran según los tiempos procesales correctos.

Todas las carpetas se han vinculado a proceso, los dueños y administradores de los hospitales.

“Esa vertiente también va caminando, si entendemos que se ha llegado a acuerdo de indemnización, de reparación del daño, las menos, porque las más son las que están en el Hospital del Parque, hasta donde sabemos no ha habido ningún acuerdo de indemnización. Los procedimientos jurídicos están dentro de los tribunales, y lo que nos informa la fiscalía, y la comunicación que tenemos entre la maestra y un servidor se encuentran dentro de los tiempos procesales”.

Reconoció que en los casos del hospital Santé, Dikcava y San Carlos contaban con menos casos y de lesiones, y se ha llegado a acuerdos. “Te puedo decir que en Hospital del Parque víctimas mortales son 37 de 41”.

Terapeutas están tratando a los huérfanos para que cuando crezcan lleven una vida lo más cercana a la normalidad. Y es que hay familias donde se quebraron las relaciones y se busca la manera de apoyar para que mejoren las condiciones para los adultos, y en otros casos, los viudos se ayudan de gente cercana.

aarp


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