Tal vez pienses que si tu hijo o hija aún tiene dientes de leche, no es necesario llevarlo al dentista o que no importe mucho la higiene porque de todas formas se le van a caer. Te tenemos una noticia: has estado viviendo una mentira todo este tiempo.
En realidad, la primera visita al dentista debería ser cuando aún somos bebés, entre los cuatro y los seis meses de vida, para garantizar una buena salud dental en el futuro. Es por eso que la Odontopediatría, es la especialidad de la odontología enfocada en estrategias claras para el cuidado bucal de los más pequeños.
Pero además de llevar a tus hijos al dentista, hay otros elementos a tomar en cuenta para ayudarlos a tener una dentadura perfecta cuando crezcan. Iliana Urrea, odontopediatra de la clínica Sandilia, nos ayuda a resolver las dudas que puedan tener los papás primerizos.
“Es muy importante que los bebés tengan un seguimiento de su salud bucal. Antes de que salgan los primeros dientes, se debe limpiar la boca del bebé una vez al día con gasas humedecidas para quitar restos de leche materna o alimentos y evitar el desarrollo de caries”, dijo la especialista.
Además, a partir de que aparezca el primer diente, deben cepillarse al menos dos veces por día por el resto de su vida.
¿Los dientes de leche no importan porque de todas formas se caen? Has vivido engañado
Quizá te parezca exagerado ir al dentista si de todas formas los dientes de leche se caerán, pero de eso dependerá que tu hijo tenga una bella sonrisa cuando sea grande. Los primeros dientes no sólo son fundamentales para alimentarse de forma adecuada, sino que también favorecen el crecimiento de los niños y permiten el correcto desarrollo para una buena estructura ósea.
“Los dientes de leche ayudan a conservar los espacios necesarios y son la guía para la dentición adulta, o sea, la dentadura para toda la vida”, dice Urrea.
Además, la enfermedad bucal más común de los niños es la caries que puede provocar dolor e inflamación por infecciones graves y la pérdida de un diente.
Caries
Se crean cuando existe un desequilibrio en la cantidad de bacterias que vive normalmente en nuestra boca, y la forma en la que estas procesan los azúcares produciendo ácidos que destruyen la superficie externa del diente. Para eso es importante una buena higiene bucal sumada a visitas regulares al dentista.
¿Cómo cuidar bien los dientes y encías de los niños?
Sabemos que todo el tiempo escuchas técnicas de cepillado y lavado de dientes, pero también sabemos que es más fácil escucharlas que aplicarlas. Por eso, nuestra especialista nos dejó un par de recomendaciones para que tu bebé tenga una dentadura sana desde ahora y, quién sabe, igual y te sirven a ti también.
La técnica para limpiar las encías del bebé es:
1.- Lavarse las manos
2.- Humedecer una gasa con agua limpia.
3.- Envolver el dedo índice con la gasa.
4.- Palpar las encías superior, inferior, paladar y lengua para limpiar su boquita delicadamente.
Es importante acudir al odontopediatra para que te explique la mejor manera de realizar la limpieza de encías de tu bebé.
¿Cuál es la técnica correcta del cepillado?
Como papá o mamá, debemos ser responsables del cepillado dental de los niños al menos hasta los 8 años de edad, hasta que ellos sean capaces de hacerlo correctamente por sí mismos. La regla de oro para todos debería ser: un niño no puede ir a dormirse si no se ha cepillado sus dientes. Además, deberá usar un cepillo de tamaño recomendado por un odontopediatra.
1.- Tener el cepillo de acuerdo a la edad del niño
2.- Usar una cantidad igual a una lenteja de pasta de dientes. La pasta de dientes para niño tiene características diferentes a las de adulto.
3.- El cepillo no se moja, entra seco a la boca con la pasta.
4.- Hay que cepillar desde la última muela con un barrido entre los dientes y el cachete (afuera) 10 veces. Este proceso se repite hasta recorrer la arcada inferior y superior (todos los dientes de la boca).
5.- Hay que cepillar la última muela con un barrido entre los dientes y el paladar (adentro) 10 veces. Este proceso se repite hasta recorrer la arcada inferior y superior (todos los dientes de la boca).
6.- Al último limpiaremos con un barrido circular la cara oclusal de las muelas (con lo que mordemos) en la arcada superior e inferior, es importante tener un proceso ordenado y limpiar todos y cada uno de los dientes. Hay que limpiar todos los dientes para evitar la caries.
7.- La lengua también debe limpiarse
8.- La pasta dental, cepillo, hilo dental y otros aditamentos solo lo puede indicar el odontopediatra porque son específicos para cada niño.
Recuerda que la limpieza dental es un hábito que hay fomentar desde la niñez. Agenden una cita en Sandilia al teléfono 55 45 44 29 68 con la Odontopediatra Iliana Urrea y piérdanle el miedo a tener una sonrisa bonita.