La Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) No. 71, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en Coahuila, incorporó en el 2022 a su cartera de servicios la cirugía de estimulación cerebral profunda, mediante la cual se inhiben los síntomas de la enfermedad del Parkinson y se contiene su avance durante un período de 15 a 20 años, a través de la colocación de un aparato que emite impulsos eléctricos a los núcleos del cerebro.
Durante el año anterior, se logró intervenir con éxito a nueve personas, la primera de ellas, Esteban, de 51 años y originario de Delicias, Chihuahua, quien gracias a la aplicación de este procedimiento volvió a tocar la guitarra y el piano.
El neurocirujano que encabeza las intervenciones, doctor Nery Alexander González Rodríguez, explicó que esta técnica se realiza en coordinación con el departamento de neurología a cargo de la doctora Diana Sánchez, entre ambas áreas, con apoyo de un equipo multidisciplinario y de una gran cantidad de estudios, protocolizan a los pacientes para buscar su mayor beneficio.
La enfermedad del Parkinson tiene cinco etapas; el procedimiento debe realizarse cuando la persona se encuentra entre la fase 2 y 3, y presenta complicaciones motoras de difícil control tales como rigidez, lentitud, temblor e inestabilidad postural, aunado a que se debe contar con pruebas neuropsicológicas y psiquiátricas para descartar la existencia de algún otro cuadro clínico.
¿Cómo se realiza el procedimiento?
Expuso que las cirugías se realizan por medio de estereotaxia la cual es una técnica neuroquirúrgica que posibilita el acceso a zonas profundas del cerebro mediante una aguja de biopsia, que permite tomar muestras con absoluta precisión.
A través de la tomografía axial computarizada y la resonancia magnética se identifica el área cerebral a la que se quiere acceder y se trasladan estas medidas a dos coordenadas espaciales (x, y), que determinan el sitio específico en donde se deberán colocar los neurotransmisores, señaló.
González Rodríguez sostuvo que la cirugía se realiza en dos momentos: en el primero el paciente está despierto y con ayuda de un marco de estereotaxia que se coloca en su cabeza, se introducen -en orificios de aproximadamente 15 milímetros- los electrodos de un estimulador que se sitúa en los núcleos cerebrales profundos y que emiten impulsos eléctricos a través de los cuales se contienen los síntomas de la enfermedad.
En esta parte se requiere de toda la intervención y apoyo del área de neurología quienes también ingresan a quirófano, valoran y realizan pruebas en ese momento para medir las respuestas.
Posteriormente, ya con anestesia general, se colocan por debajo de la piel y hasta llegar a la clavícula, las fuentes de energía del aparato, sostuvo.
Describió que la persona se mantiene tres días en el hospital y egresa a su domicilio con el equipo apagado para dar oportunidad a que cicatricen las áreas en donde se introdujeron los electrodos. Tres semanas después el aparato se enciende para regular la respuesta a la estimulación cerebral. Posteriormente, el neurotransmisor se programa a través de un dispositivo móvil (tipo tableta) para determinar la intensidad.
Si bien este procedimiento no cura la enfermedad, la persona podrá llevar una vida casi normal durante los siguientes 15 a 20 años, ya que la sintomatología prácticamente desaparece, se reducen las dosis de medicamentos y deja de depender de su familia., expuso.
Durante ese tiempo habrá necesidad de cambiar las baterías al aparato, cuya duración es de dos a cinco años. “Es como un marcapasos, pero en este caso es para el cerebro”, precisó el neurocirujano.
Destacó que, en el ramo de la neurocirugía, el Parkinson es el tercer motivo de atención médica, es una enfermedad incapacitante y que afecta principalmente a varones, algunos de ellos en etapa productiva como es el caso de Esteban.
“En el 2022 fueron operados los primeros nueve pacientes, a cada uno se le colocaron dos neuro trasmisores y todos han tenido resultados exitosos”, concluyó.
"Es volver a la vida otra vez", Esteban primer paciente de cirugía contra el Parkinson en Coahuila
Esteban y su familia son habitantes de Delicias, Chihuahua. Antes de padecer la enfermedad se desempeñaba como ayudante de contabilidad y en sus ratos libres se dedicaba a la producción musical; ambas cosas y muchas más las tuvo que dejar debido a las afectaciones del Parkinson, que iniciaron en el 2007 con temblores en sus manos y que, al paso del tiempo, lo imposibilitaron para hacer actividades básicas como bañarse, cambiarse, comer por sí solo e incluso sentarse.
Fue el 16 de febrero del año pasado, cuando tuvo su primera cita con el doctor Nery en la UMAE No. 71, del IMSS, quien le explicó los pormenores de la cirugía y, a través de un vídeo les hizo saber el método que utilizaría, recordó.
“Nunca perdimos la fe, seguimos todas las indicaciones y gracias a Dios llegamos aquí; el doctor Nery, la doctora Diana y todos han sido ángeles para mí. Estamos muy agradecidos con el Seguro Social, con esta clínica de especialidades, con el personal; han sido un equipo excepcional”, declaró.
Expuso que luego de diversos estudios y pruebas, su intervención se realizó de manera exitosa el día 7 de junio del 2022.
Agradeció el trato profesional del equipo de neurología, encabezado por la doctora Diana Sánchez, quien estuvo presente en el quirófano mientras los cirujanos realizaban su trabajo, ya que en todo momento se mantuvieron al pendiente de su estado y junto con el equipo de médicos le daban masajes, palabras de ánimo, incluso le permitieron hacer una llamada telefónica con su esposa, quien permanecía en la sala de espera.
“Esto me ha dado otra oportunidad, es como volver a la vida otra vez. Me siento muy orgulloso de ser mexicano y de contar con este servicio de clase mundial y estoy feliz de volver a tocar el piano, la guitarra y los instrumentos musicales”, declaró conmovido.
Su esposa, Nora, compartió con gusto que a la semana de haber sido intervenido inmediatamente volvió a tocar sus instrumentos. Actualmente Esteban no sólo regresó a disfrutar de lo que le apasiona, sino que puede realizar sus actividades cotidianas por sí mismo.
cale