La asociación civil Alas para Crear cumplió cinco años, tiempo en el que han cumplido metas y sueños, en el que han podido ayudar a cientos de mujeres en condición de cárcel, ofreciendo talleres, capacitaciones y cursos para empoderarlas y que tengan las herramientas para trabajar y tener mejores oportunidades cuando salgan de prisión.
Durante este tiempo, Daniela Hernández, fundadora de esta asociación, así como su hermana y coordinadora de comunicación, Reyna Hernández, han sido una mancuerna que ha logrado atravesar los barrotes y las grandes paredes del Centro de Readaptación Social (Cereso) de Pachuca, así también de Tlaxcala y Puebla.
“Lo más difícil ha sido quitar los estigmas en la sociedad pero, hoy con mucha alegría puedo decir que en Hidalgo, Puebla y Tlaxcala las familias están apostando por las segundas oportunidades y que hemos hecho consciencia de que juntas y juntos vamos a poder construir el tejido social, porque no solo es tarea del gobierno, sino de las organizaciones civiles que podemos seguir sumando.
“Recuerdo que las primeras opiniones que encontrábamos de las personas es de cómo iban a apoyar a la gente que cuando salieran de prisión las iban a robar, o por qué apoyar a delincuentes, por lo que este estereotipo y los señalamientos han cambiado poco a poco”, indicó Reyna.
Es así como este apoyo se está extendiendo por lo que ahora no sólo apoyan a mujeres, sino también a hombres que se encuentran en prisión pero, sobre todo, a niñas y niños que crecen dentro de prisión junto a sus madres.
“Hay que recordar que en Hidalgo las y los niños viven con sus mamás dentro de prisión hasta los tres años y estamos contentas de informar que estaremos realizando nuevamente el programa Alitos, que estamos restructurando para apoyar más a las infancias para que sean plenas, por lo que estamos invitando a la sociedad a que sigan sumando voluntades.
“En esta campaña solicitaremos artículos de primera necesidad y que ayuden a intensificar las medidas sanitarias por lo que estamos solicitando la donación de toallitas húmedas, pañales, leche en polvo y otros artículos”, informó.
Expuso que es necesario continuar apoyando a las infancias que están creciendo dentro de las prisiones para que tengan una mejor calidad de vida, además de que proseguirán ofreciendo talleres, conferencias y capacitaciones para mujeres y hombres en esta situación, así como a las empresas que se suman a abrir las puertas de sus negocios para que puedan conseguir trabajo cuando salgan de prisión “porque esta son las verdaderas segundas oportunidades y que como sociedad podamos reconstruir el tejido social”, concluyó Reyna.