Su amor por sonidos del acordeón lo llevó a enseñarse a repararlos

El también músico de vallenato recordó que uno de sus primeros clientes fue Celso Piña

Herbey, desde hace 14 años aprendió a reparar  acordeones y su negocio ya se encuentra bien consolidado. Fotos: Leonel Rocha
Leonel Rocha
Monterrey /

Aunque no tenía antecedentes para aprender, ni una formación académica, el amor por escuchar el sonido de los fuelles, lengüetas y cajas de la acordeón llevaron a Herbey López a convertirse en técnico y reparar estos instrumentos.

Desde su negocio, ubicado en el mercado Díaz Ordaz, sobre la avenida Morones Prieto, en Monterrey, el reparador contó en entrevista para la plataforma MILENIO-Multimedios cómo inició con su oficio.

“Yo me enseñé solo a reparar las acordeones, para esto no hay escuelas, o se trae o poco a poco vas involucrándote.
“De chavillo, mis tíos tenían una agrupación y con sus instrumentos empecé a probar. Echando a perder se aprende”.

Y aunque sabe de pocos talleres, Herbey cuenta un poco de cómo han sido los últimos 14 años, donde ha logrado consolidar su negocio.

“Antes era muy poca gente la que se dedicaba a esto, eran contados. Ahorita tenemos 10 años ya en el taller, pero empecé en mi casa. Tengo unos 13 o 14 años dedicándome a esto”.

El técnico en reparación de acordeones recordó que uno de sus primeros clientes fue Celso Piña, quien le mandaba las acordeones a su casa, pues todavía no tenía local, y en otras ocasiones le pidió que fuera a recoger los instrumentos, debido a los compromisos laborales que tenía.

Aunque un acordeón nuevo tiene precios que van de los 6 mil a los 400 mil pesos, aproximadamente, mucha gente todavía prefiere reparar sus instrumentos, ya sea por el valor sentimental o el económico.

“El problema más común es que se quiebren las voces, que son como un tipo armónica que traen las cajas de las acordeones, que al pasar el aire producen el sonido. Son las que más se producen casos, porque éstas se quiebran.
“Las otras son las desafinaciones, cuando las voces o lengüetas no están bien calibradas”, dijo el técnico.

Cabe señalar que Herbey no solo se dedica a la reparación, pues también es músico y eso lo ha llevado a ser uno de los integrantes de Contacto Vallenato, una agrupación que se enfoca en las cumbias y en los paseos románticos.


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