Ángel es un niño de 14 años de edad que recientemente acaba de obtener su acta de nacimiento. Al igual que él, decenas de personas hasta de casi 80 años de edad no la tenían y ahora pueden ejercer sus derechos a la educación y a la salud.
Ahora al menos 600 personas ya cuentan con su acta de nacimiento debido al programa Guanajuato con Identidad y tras un proceso legal y de testigos como las parteras, depende el caso, es que pudieron obtener su acta de nacimiento para ejercer sus derechos, aunque hay más en la fila.
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El caso de José Ángel fue el más difícil para el equipo, pues sus papás no lograron ponerse de acuerdo, pero ahora, ya está cursando el primero de primaria.
“Me siento muy feliz para ser alguien en la vida porque no me podía meter a la escuela porque decían que era como si nunca me hubieran enseñado y necesitaba los papeles, nunca estudié, voy en primero”, comentó el menor de 14 años.
Este programa comenzó cuando unos universitarios, apoyados por la maestra Andrea Polak, vieron esta necesidad en la Plaza de la Ciudadanía de Las Joyas, dónde muchas personas no contaban con su acta de nacimiento.
Se dieron cuenta cuando Laura, una menor de 11 años de edad en aquel entonces, quería entrar a los cursos de verano, pero no podía porque no tenía su documentación completa y eso orilló a que las promotoras del lugar y los estudiantes crearán el programa junto con el Registro Civil de Guanajuato.
La mamá de la niña, Gabriela González, contó a este medio un poco sobre el proceso, pues ella no la pudo registrar porque dio a luz en su casa y no tenía el certificado de alumbramiento expedido por un médico.
“No porque me alivié yo sola, fuimos con Alejandra (promotora) mis sobrinos más que nada y la querían meter a los cursos de verano y ella no podía entrar porque no tenía el acta y ya después Alejandra movió papeles y nos dijeron que iban a revisar y la ayudaron varios muchachos”, comentó.
La maestra Andrea Polak platicó que por lo general las personas con esta situación son de escasos recursos y de nivel de educación bajo, por lo que el proceso, donde a veces tiene que intervenir el abogado y el Ministerio Público, les resulta engorroso.
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Dijo que en este proceso descubrió que los recursos legales están muy definidos cuando se cumple con ellos, pero no cuando no se pueden cumplimentar y en esa situación de casos complicados se encuentran muchas personas, pues ahora han ayudado hasta a personas de 80 años de edad que nunca han tenido su acta de nacimiento, y por ende, no tienen derecho a la educación, oportunidades laborales y se van cerrando puertas, pues además explicó que cuando te conviertes en padre o madre tampoco les pueden heredar ese derecho a tus hijos.
Lo que ha hecho es acudir, por el ejemplo, en el caso de Laura, con el doctor para que testifiquen, así como las parteras que ayudaron a nacer a otros niños, pero se ocupaba una homologación de criterios y fue parte del trabajo que realizaron los estudiantes con el gobierno del estado.
“El doctor que la recibe del Centro de Salud la ayuda con el tema de la placenta, pero al no recibir el a Gabi no puede emitir en ese momento un certificado de alumbramiento, entonces le emite una receta médica donde dice que está recibiendo una señora y que tuvo una bebé con tal peso, producto femenino”, comentó.
El director del Registro Civil de Guanajuato, Juan Hinojosa Diéguez, dijo que el proyecto ya se abrió a más municipios como Celaya, Salamanca, Irapuato y Silao, por mencionar algunos, derivado de la necesidad que hay de registrar a más personas sobre todo de las comunidades o colonias de la periferia porque esto les da un pase directo a más derechos.
El Registro Civil realiza aproximadamente 120 mil actas de nacimiento al año, es decir, 300 al día, con 240 oficialías que hay en el estado de Guanajuato.