El sábado el mundo del espectáculo nacional se cimbró con la noticia del fallecimiento de Ignacio López Tarso, su trayectoria en cine, teatro y televisión impactó generaciones, tal es el caso de Armando Arenas, un joven hidalguense originario de Tulancingo, director del cortometraje curandero, el cual contó con la participación del primer actor.
Armando no oculta el impacto que esta noticia tuvo en su persona, ya que además de ser admirador, alcanzó a trabajar con él hace apenas tres semanas “Una noticia que nos sorprendió a todos, como un balde de agua fría. Tuve la fortuna de tener a don Ignacio en el proyecto hace tres semanas. El proyecto surgió en su honor”.
¿Cómo surge tu admiración por don Ignacio López Tarso? Desde niño, tenía seis años, vi el hombre de papel y me generó un sentimiento único, de niño dije no quiero volver a ver esa película porque tenía miedo de perder ese sentimiento, son de esas películas que me marcaron y se volvió un ícono de admiración.
¿Cómo se dio el contacto para trabajar con él? Estudié la carrera de cine en la Buap y a la par empecé mi carrera en proyectos como asistente de producción y a través de enlaces que me fueron conectando. El guion lo escribí hace cinco años estando en la carrera, teniendo en mente a don López Tarso y aunque decía que era imposible al personaje lo imaginaba con él.
Comenta que con el paso de los años su guion llegó a manos del actor “Por medio de una llamada telefónica me dice que le gusta el guion, eso fue cuando comenzaba la pandemia, lamentablemente no se pudo y estuve a punto de abandonar el proyecto, pero este año lo retome, nos pusimos en contacto y aceptó e incluso me dio asesorías de guion para el personaje”.
La admiración de Armando hacia el primer actor es innegable se expresa de él con agradecimiento y respeto al recordar el tiempo que trabajó con el “Él es admirable es una persona que a pesar de su edad podía analizar un personaje, dar una asesoría y platicar sobre su personaje.
¿Con que lección se queda Armando como fan? Hice un mensaje de despedida en mis redes, no solo fue la admiración sino conocerlo también como persona, que te pudiera relatar historias, si se me hubiera permitido estar toda la noche escuchándolo lo habría hecho. Porque era una persona con tantas historias, sabiduría que era lo que buscaba para mi personaje, buscaba a alguien con sabiduría y el hecho de estar ahí y poder grabarlo, escuchar las palabras que había escrito en papel, con la voz que soñaba y como persona muy amable, nos abrió las puertas de su casa, contaba chistes se reía con nosotros, fue una conexión aparte.
Me quedo con la complicidad entre director actor, cuando terminamos de trabajar los dos nos sonreímos, de pronto me olvide que era el gran López Tarso, pero regresaba el golpe de realidad y dimensionaba el tamaño de actor que estaba enfrente de mí, todo fue con mucho respeto.
Armando comenta que grabaron hace tres semanas, el 17 de febrero, "Cuando entre a la carrera en Puebla la primera semana que llegué vi un espectacular en el que se presentaba con "El Loco" Valdez en la obra de aeroplanos y pensé lo tengo que verlo actuar en vivo, hace nueve años no me imaginaba que podría verlo en un escenario y que después estaría en su casa grabando un personaje que yo escribí. Son memorias que voy a atesorar".
¿Cómo fue su trato personal? Con mucho respeto, platicamos en general del proyecto, me dio algunas anotaciones, hicimos un ensayo general, nos platico sus anécdotas de teatro, su vida que me ayudó a relajarme, estar en su estudio con todos sus premios es un sentimiento difícil de explicar.
¿Puedes hablarnos sobre Curandero? El proyecto está en preproducción, grabamos la escena de don López Tarso que es la escena central del cortometraje tenemos grabado lo de su personaje y tenemos planeado que este año se realice, el próximo año estará en etapa de postproducción. La historia habla de la muerte, de dejar ir a un ser querido y estamos en espera de comenzar con el proyecto; el guion era para él y ahora más que nunca está dedicado para él.
Armando recuerda que durante las grabaciones, su interacción siempre fue de frente e incluso, el maestro López Tarso como también lo refiere, le indicaba si algún dialogo requería más énfasis. Terminé la carrera durante la pandemia y eso fue como un detente, ahora dije es el momento y quizás el destino dijo el momento es ahora.
El maestro López Tarso me dio un gran regalo que fue aceptar participar en el proyecto y así como el me dio el regalo de darle voz a mi personaje, este cortometraje va a ser un regalo que yo le voy a dedicar.
Antes de terminar la entrevista Armando aprovecha el espacio para agradecer a la familia del actor por abrirle las puertas de su casa y la amabilidad con él y su equipo de producción.