En un análisis profundo sobre lo que sucede y sucederá con la economía de Hidalgo en este y los próximos años, el profesor e investigador de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), Roberto Morales Estrella, indicó que se requieren de tres acciones fundamentales para ver resultados más palpables en el crecimiento de la entidad: la reflexión, un plan de desarrollo funcional y el empuje real de la promoción y venta de productos endémicos y locales.
Y es que, para entender la situación que vive la entidad, en medio de una pandemia, el especialista considera que tras las cifras de 2020 y la contracción del comportamiento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que fue de 7.9 por ciento que recayó en actividades secundarias como la industria y el comercio, también lo fue para Hidalgo que tuvo una caída del 10.9 por ciento, afectando en las mismas actividades.
Además de otros elementos como la productividad total de los factores, en el que a nivel nacional descendió en 3.9 por ciento en 2020, en relación con 2019, en Hidalgo, este indicador marcó un -9.29 por ciento.
“Ha ido caído a nivel nacional y con ello la economía de Hidalgo. En una referencia, en 1991 el valor de la producción fue de 5.47 y la productiva 1.01, mientras que en 2020 es de -9.29 el valor producción y la caída fue de -3.69 por lo que es significativa la caída, y esto se debe también a que en el estado no tenemos un desarrollo tecnológico, además de que el nivel de la pobreza también incrementó hasta dos puntos porcentuales, del 55.2 al 57.2 por ciento.Es por ello que considero que en este 2022 se debe reflexionar por qué no hemos crecido, además de que el Plan Estatal de Desarrollo del siguiente gobierno estatal deba de tener presente que no vamos a avanzar si no cerramos la brecha tecnológica en todos los sectores productivos y, en un tercer punto, rescatar los productos endémicos y el trabajo natural del estado de Hidalgo, obligar a tiendas departamentales a que vendan productos que se producen en la entidad, además de que se deben impulsar emprendimientos tecnológicos, de propiedad intelectual y articular áreas de conocimiento con los sectores productivos, sobre todo con pequeños productores manufactureros y del campo”, explicó.
Señaló que aún no se dan a conocer las cifras oficiales de crecimiento del 2021, pero prevé que no serán números óptimos para la entidad ya que, además, otro factor importante en el fortalecimiento de la economía es el poder adquisitivo de la sociedad y, por desgracia, en Hidalgo los salarios continúan siendo bajos en comparación con otras entidades.
“Para que Hidalgo sea un estado que este brindando mejores niveles de crecimiento también significa que se deben tener mejores salarios, pero para que se de esto, también el trabajador deberá ser más productivo y las empresas tienen que ser más competitivas, pero esto no se dará sin la tecnología y el conocimiento”, dijo.
Señaló que un factor importante por el que Hidalgo no ha tenido una caída mayor, ha sido por las remesas que llegan a la entidad y eso amortigua un decremento en los números de crecimiento que tiene la entidad desde décadas atrás.
“En 1990, la economía de Hidalgo era 10 veces más grande que Querétaro, mientras que, en 2020, Querétaro es 10 veces más grande que Hidalgo porque hay más empresas, pero sobre todo, porque los salarios son mejores, por lo que si no se mejoran los salarios no podremos mejorar nuestra economía”, concluyó.