Laura Georgina Ortega Luna, profesora investigadora de tiempo completo del Área Académica de Comunicación de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), destacó que la gordofobia pertenece a la violencia estética, la cual consiste en la presión que se ejerce hacia las personas, en su mayoría mujeres, por cumplir con los estándares de belleza impuestos a través de estereotipos de género.
La docente enfatizó que la carga psicológica que pesa sobre las mujeres provoca una guerra diaria contra su propio cuerpo, pero también contra otras mujeres, la cual es alimentada en gran medida por los medios de comunicación a través de series, películas, telenovelas o programas de televisión.
Recordó casos como Alexa Moreno, Yuridia, Michelle Rodríguez, Selena Gómez, Lizzo y Camila Cabello, actrices, cantantes y deportistas que a lo largo de su carrera han sufrido gordofobia por parte de la sociedad.
“Tenemos historias muy clásicas como ‘Bety la fea’ o ‘Mi gorda bella’, en donde el medio de comunicación quiere resaltar el componente de la belleza interna de las personas, pero las terminan transformando estéticamente".
Hizo énfasis en el reciente caso de la cantante Yuridia, quien fue atacada constantemente por la misma razón para después revictimizarla; "esto dejó atrás los logros de mujeres en los ramos del deporte y musical".
Por ello, la docente del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades (ICSHu), hizo un llamado a implementar la transversalidad de la perspectiva de género en los medios de comunicación, así como la constante capacitación con la finalidad de romper con las ideas preestablecidas y emplear la inclusión en la creación de contenidos.
“Lo importante es empezar a que normalicemos la aparición de cada persona en cada programa, serie o película, vamos a tratar a todas y todos por igual, que ahora el tema del peso no sea un tema que deba importar en el titular de una nota, no deberíamos hacer alusión al peso de una persona ni de manera negativa como positiva, porque al final terminas excluyendo”, sentenció.