Algo que distingue a los norestenses y en particular a los regiomontanos es su historia industrial, pero también destaca su tradición cervecera, pero ¿qué hay detrás de esta historia, en la que se ve involucrada una de las empresas más longevas y que se mantienen con vida en Nuevo León?
Cervecería Cuauhtémoc nació en 1890, aunque hoy está completamente en la zona Centro de la ciudad, cuando se dio su construcción se localizaba a las afueras de ella, en el camino a San Nicolás y su diseño está basado en las grandes compañías cerveceras estadunidenses, de donde era originario su primer maestro cervecero, Joseph Maximilian Schnaider, quien también fue uno de sus fundadores.
Aunque no ha sido el único momento destacado de la cervecería, pues entre sus recuerdos guarda la ocasión en que carrancistas perdieron su oportunidad para tomar Monterrey, pues llegaron a la cervecería y consumieron una parte importante de la producción, lo que provocó que al día siguiente se sintieron incómodos y dejaron pendiente la toma.
Desde 2010, FEMSA (Fomento Económico Mexicano) cambió el total de sus acciones de cervecería Cuauhtémoc por el 20 por ciento de las de Heineken, el siguiente recuento histórico se da en el marco de la venta de dicha participación, de la cual un fragmento fue comprado por el multimillonario Bill Gates hace 10 días.
A continuación te presentamos algunos de los puntos señalados como los más destacados de su historia:
Fundación
La cervecería Cuauhtémoc fue fundada en 1890 por iniciativa de José Calderón Penilla, Isaac Garza Garza, José Muguerza, Francisco Sada Muguerza y Joseph Maximilian Schneider, quien venía de San Luis, Missouri, Estados Unidos, y ya tenía experiencia como maestro cervecero.
Desde su fundación, el producto de Cuauhtémoc tenía la finalidad de ser exportado, aprovechando su producción.
“La cervecería Cuauhtémoc fue la primera industria establecida en Monterrey que fue concebida como una industria para exportar a gran escala”, señaló en entrevista para la plataforma MILENIO-Multimedios el historiador Eduardo Cázares.
Su arquitectura
Si bien hoy cervecería se encuentra en la zona Centro, en 1890, año en que se construyó el edificio que la ha albergado en toda su historia estaba al norte de la ciudad, pues Monterrey terminaba alrededor de lo que hoy es el Arco de la Independencia.
El edificio de cervecería fue ideado para ser similar al de las plantas que se ubicaban en San Luis, Missouri. En 1910, este edificio era el más alto de la ciudad.
“Desde un principio, la cervecería se construyó con otro tipo de fachada, con ladrillos; Joseph Maximilian Schneider también fue el encargado de construir la planta y en San Luis, Missouri, ese era el tipo de arquitectura”, dijo el historiador.
Por la toma de Monterrey
En 1913 se da una serie de conflictos entre los carrancistas y el Gobierno federal, que era encabezado por Victoriano Huerta, pues pretendían tomar la ciudad, sin embargo, la defensa por parte del batallón Cuauhtémoc no fue suficiente.
“El suceso bochornoso fue que los carrancistas tomaron la cervecería, se la tomaron y no pudieron tomar la ciudad”, refirió el historiador Cázares.
Otros gustos
Aunque en Monterrey se tenían antecedentes de cervecerías artesanales, éstas no prosperaron y fue hasta que se dio lugar a Cuauhtémoc que se contó con un producto de calidad de exportación.
“Fue una innovación, porque la cerveza aquí en el noreste era conocida, pero se importaba, se traía de San Luis, Missouri (Estados Unidos), era cerveza Schnaider y otras marcas, pero era muy cara.
“La gente del pueblo tomaba pulque o mezcal, y la gente acomodada bebía champagne o vino, porque la cerveza era cara y no les gustaba mucho el sabor”, dijo.
Apoyo a la industria
Cervecería no llegó sola, fue un importante impulso para las industrias complementarias, entre ellas la del cartón, vidrio y cemento.
“Es uno de los cimientos más importantes de la industria, junto con Fundidora, que se estableció en 1900, cementos Hidalgo, Cementos Mexicanos, que se instalaron años después; Vidriera, que sirvió para abastecer a cervecería de botellas, todas ellas fueron los cimientos para la industrialización de Monterrey”, señaló el historiador.