En lo que va del 2022 las lluvias no han sido suficientes para que las principales presas de Guanajuato capten un porcentaje de agua considerable, al punto que los niveles se encuentran inferiores respecto a los del 2021, según el monitoreo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
En su Sistema Nacional de Información del Agua, señala que durante agosto del 2021, el almacenamiento de los nueve cuerpos de agua de la entidad rondaban en un promedio del 62.38 por ciento y aumentando, teniendo en cuenta que en esas fechas se registraron lluvias torrenciales importantes desde julio, permitiendo una recuperación importante que benefició al estado.
Actualmente los nueve cuerpos rondan por el 60.42 por ciento de almacenamiento, manteniendo un nivel estable con las pocas lluvias de la temporada y siendo ligeramente menor a los niveles del 2021.
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Una de ellas es la presa del Palote, ubicada en la ciudad de León y que tiene niveles de agua del 39 por ciento, cuando el mismo día del 2021 rondaba por el 43 por ciento, es decir, casi por los niveles permitidos para la extracción de agua.
El problema se deriva a la sequía que afecta gran parte del territorio nacional, pero en el caso de guanajuato, alrededor del 40 por ciento del territorio norte presenta sequía severa, 40 por ciento sequía moderada y el restante se encuentra anormalmente seco de acuerdo al reporte más reciente de sequía por la Conagua.
Según los pronósticos del clima muestran expectativas positivas para las presas del Estado, pues se esperan lluvias importantes para el resto de la semana que podrán estar acompañadas de descargas eléctricas, vientos fuertes y probable caída de granizo.
Del mismo modo podrían ocasionar el incremento en los niveles de ríos y arroyos, deslaves e inundaciones en zonas con poca estabilidad terrenal.
PCQG