La fracción parlamentaria del PRI propuso al pleno del Congreso modificar el Código Penal para castigar con penas de uno a tres años de prisión y de 50 a 700 días de multa, además de seis meses a dos años de suspensión del derecho de ejercer la actividad profesional y privación definitiva en caso de reincidencia a los médicos veterinarios zootecnista que incurran en negligencia y omisiones en el ejercicio de su profesión.
La diputada Paola Jiménez Hernández, autora de la iniciativa, indicó que se busca sancionar a los médicos que pongan en peligro la integridad o cause la muerte de animales domésticos o seres sintientes, con el fin de reducir los casos que se han registrado en la entidad, por la falta de experiencia y práctica, imprudencia o falta de ética.
En la iniciativa, que fue turnada a comisiones para su análisis, se establece que “los veterinarios son los especialistas en velar por la salud y bienestar de los animales, deben contar con los estudios y capacitación para brindar una atención de calidad, en donde la vida del ser vivo sea su prioridad y cumpla con los estándares médicos necesarios”.
La diputada local señaló que las leyes actuales en México, en caso de negligencia veterinaria, no proceden de la misma manera que en caso de una persona porque los animales son considerados como bienes, es decir objetos de propiedad.
Por ella razón, actualmente sólo se puede denunciar por daños a la propiedad cuando otorguen servicios sin estar capacitados para ello, negarse a solicitar exámenes médicos para su operación, efectuar prácticas médicas que resulte innecesarias o inapropiadas, no dar información sobre la mascota o por no solicitar interconsultas con otros profesionales cuando el animal no responda positivamente al tratamiento.
“Sin embargo, al igual que un ser humano los animales merecen ser tratados con dignidad y parte de nuestra responsabilidad como cuidadores o dueños, es garantizarles una vida digna y ser conscientes de la responsabilidad que implica la tenencia de un animal de compañía” apuntó.
La legisladora pidió que, de ser posible, se sancione la negligencia veterinaria o mala praxis porque ningún animal es sustituible ni puede ser calificado como un bien, ni un servicio tiene por qué poner en peligro la vida o causarle la muerte.
RARR