En Metepec, los carnavales son un despliegue mágico de colores que convierten las calles en un lienzo efervescente de alegría y tradición, y no será diferente este próximo 10 de febrero cuando se realizará su carnaval.
Las familias se unen para apoyar a quien será la reina de esta festividad, un lugar privilegiado socialmente y que llena de orgullo a quienes rodean a la elegida.
La reina de esta edición 2024, Guadalupe Huazo, fue elegida por su constante participación en el carnaval. Durante cinco años, ha dedicado tiempo, dinero y esfuerzo para ser parte de esta gran celebración.
Para Lupita, como le llaman de cariño en su familia y amigos, participar en esta fiesta significa amor, tradición y respeto a un legado que ha perdurado por más de 100 años.
“La dedicación por la participación en este carnaval va más allá de la simple presencia en la calle, es el fervor puesto en el diseño y elaboración de cada traje el cual me emociona desde que lo imagino cómo luciré”, asegura Lupita.
Revela haber invertido más de 300 mil pesos en la confección de sus tres trajes, cada uno con un peso de aproximadamente 20 kilogramos, repletos de detalles que los componen como lentejuelas, plumas, cuero y chaquiras.
La elaboración de la prenda lleva cerca de un año para estar listo, con amor y respeto, eligiendo colores vibrantes y llenos de vida.
“El traje es importante porque el carnaval es un evento que reúne amigos, familiares y toda la comunidad para convertir las calles de Metepec en el epicentro del color y la alegría”, señala con alegría.
Cuando los primeros destellos del sol acarician los techos de los edificios coloniales, la ciudad despierta con la promesa de una celebración vibrante y desbordante de creatividad.
Del 10 al 13 de febrero, Metepec abre sus puertas para todas y todos aquellos que quieran sumergirse en la magia del carnaval y vivir una experiencia única.
Las comparsas, embellecidas con trajes que desafían la imaginación, desfilan por las calles empedradas como una procesión de sueños hechos realidad.
Los tonos eléctricos y los patrones intrincados de los atuendos bailan en armonía con la luz del día, creando una coreografía visual que transporta a los espectadores a un mundo de fantasía.
Máscaras ingeniosamente esculpidas cobran vida en cada rostro, ocultando identidades, pero revelando la esencia única de cada participante.
Las plumas exóticas y las lentejuelas destellan con cada movimiento, añadiendo un toque de encanto a la expresión artística que se despliega ante los ojos asombrados.
El carnaval de Ferrería lleva más de 100 años celebrándose, donde comunidades enteras se suman a este desfile de vida que representa más que tradición, sino pertenencia, amor, gozo y alegría.
La edad no significa nada en este evento, niñas y niños de tres años hasta adultos mayores de más de 65 años, todos encuentran su espacio.
El carnaval de Metepec se convierte en un espectáculo de luz y sombra, una oportunidad para cada miembro de la comunidad para poner a danzar su alma y que cada rincón revele una nueva sorpresa visual.
Es una celebración que deja una huella imborrable en la memoria, una experiencia caleidoscópica que captura la esencia vibrante y deslumbrante de los carnavales en esta joya de Hidalgo.