Termina el 2021 y los "aluxes" se presentan en su máxima expresión en la vida de los yucatecos quienes comenzarán una nueva fase de vida; sacar el estrés, el “mal de aire” y renovar su bondad antes los dioses mayas: Kukulkán, Ixchel, Chaac y Zamná.
Los sacerdotes mayas Filiberto Ku y Tiburcio Can May, acudieron a realizar una ceremonia en lo alto del castillo de Kukulkán, en la ciudad prehispánica de Mayapán, pidiendo a los cuatro puntos cardinales para que el cierre del 2021 y la llegada del 2022 este sea abundante y próspero para la humanidad.
Algunos de los presentes se unieron a sentir los espíritus de los dioses mayas.
Ante la luz de la luna, Tiburcio realizó una adoración nocturna en la comunidad maya de Nolo, a unos 30 kilómetros de la capital yucateca, donde pidió a los dioses que desde los cuatro puntos cardinales: Xaman (norte), Nohol (sur), Chink´in (oeste), y Lak´in (este) llenara de energía a unas 30 personas que acudieron.
“Representa la sangre, representa la vida, se oculta en el poniente, el poniente es la parte obscura, la parte negra, es donde descansan los grandes animales, los grandes aires, los grandes pájaros y todo ser humano descansa de noche, esa es la parte negra del poniente que le llamamos chink´in”, dijo Can May, cuando cayó la noche.
Además, pidieron que los dioses les brinde el aire de la vida y el agua limpia para lograr realizar sus proyectos de vida, pero que no caigan en falsas imposiciones por miembros de la sociedad queriendo tener el dominio de ellos y sus familias.
“Qué es el inframundo, donde actualmente los padres dicen que ahí vas a pagar tus pecados, cuando te mueras, cuando te entierran, cuando todo esto, pero nada de eso es cierto, el pecado no existe, el pecado no hay, son cosas donde nos atrapan, nos ponen”, dijo Tiburcio en la ceremonia maya al finalizarla.
Alejandrina González, una fiel creyente de la cosmología del Mayab y de la acupuntura, acudió a una “limpia” con Tiburcio y Filiberto para que la liberara de la carga negativa.
Después, dijo sentirse “mucho mejor, mucho mejor, más tranquila, más relajada, como más liviana, más liviana, sí, sí”. Dejó atrás “carga, ansiedad, sobre todo ansiedad, me siento más liviana, más tranquila, más relajada, muy recomendado”, dijo González.
Mientras tanto, en el parque arqueológico de Dzoyilá se realizó la ceremonia maya de la abundancia de las semillas, encabezada por el sacerdote Jesús Xijum Aké quien explicó que:
“Se traen semillas con el objetivo de mezclarlas, revolverlas para que se unifiquen diferentes semillas y esas semillas se le hace una oración para desearle al poseedor de esas semillas pues un bienestar, así como también si esas semillas alguien las quiere sembrar todo se multiplica”, dijo Xijum Aké.
RM