Sobreviviente de cáncer de mama regala turbantes a pacientes diagnosticadas

Una iniciativa que empezó como una comunidad de apoyo en redes sociales se ha convertido en una comunidad de altruismo dedicada a ayudar a mujeres que padecen cáncer de mama, liderada por Sagrario Ávila Hernández.

Sagrario Ávila Hernández sobreviviente de cáncer.
Karla Guerrero
Ciudad de México /

Hace nueve años, Sagrario Ávila Hernández fue diagnosticada con cáncer de mama luego de una autoexploración derivada de la aparición de un bulto no convencional en su seno derecho. Al acudir a atención médica al Fucam, el resultado fue desalentador pues el tumor estaba en una etapa avanzada.

“Estaba un poco complicado el problema porque mi tumor era un poco grande, medía cuatro centímetros. En septiembre del 2012, me hicieron la biopsia, fue positiva ya estaba un poco avanzado el cáncer y el tipo de cáncer ya estaba en etapa 3C, triple negativo. Ellos me transfirieron al seguro social en donde me revisaron, valoraron mis estudios y me dijeron que tenían que operarme”, aseguró Ávila, en entrevista con MILENIO.

El 19 de octubre del 2012, le realizaron una cirugía conservadora de seno, “me quitaron 47 ganglios de los cuales 16 ya tenían metástasis y de ahí empezó todo mi proceso”. Durante el tratamiento de ocho quimioterapias y 33 radiaciones, Sagrario “sufrió un proceso fue muy difícil porque las quimios son muy agresivas, te tiran el cabello”.


En 2013, decidió abrir su página vía redes sociales “En unión contra el cáncer de mama” para compartir experiencias con otras pacientes y apaciguar a través del apoyo moral, el difícil proceso de cada una de las mujeres sufre en el tratamiento “comencé a compartir imágenes de motivación; se empezaron a unir las personas que estaban pasando por la misma situación, en ese momento, fue creciendo la comunidad”.

En febrero del 2019, Sagrario creó la campaña Cubriendo con amor para poner a la venta prendas de ropa, pulseras, gorras y otros souvenirs para recaudar dinero y comprar turbantes para algunas pacientes de la Ciudad de México.

“Decidí comenzar a ayudar porque veía que muchas personas sufrían demasiado, padecían mucho; sobre todo, anímicamente. Entonces comencé a vender los souvenirs, como playeras, tasas, sudaderas, gorras, pulseras, para dar turbantes a las mujeres que los necesitarán”, dijo.

La colecta benéfica ha proporcionado más de 500 turbantes a las mujeres mexicanas del Fucam, instituciones del Seguro Social y Hospitales Generales de la capital. Ávila asegura que en el año de la pandemia, la población no perdió su espíritu altruista, pues se entregaron más de 300 turbantes, lo que representa el 60 por ciento de los gorros regalados por la asociación.

“Con la pandemia, la verdad no se detuvo. Fue un año bastante bueno; la gente, si aportaba mucho, llegó a comprar mucho porque decidí lanzar cubrebocas porque sabía que por la emergencia sanitaria, los comprarían”, dijo.

Ahora, a sus 33 años de edad, Ávila espera poder seguir proporcionando ayuda contra las pacientes mexicanas, con el fin de crear una asociación civil que brinde tratamientos y prótesis de manera gratuita.

“Vamos por más, esta semana voy a visitar el Centro Médico y el Instituto Nacional de Cancerológica para repartir decenas de turbantes. Nos piden ayuda de tratamientos pero no tenemos tanta solvencia económica. Ya estamos a unos pasos de que seamos una Asociación Civil, ya con un acta constitutiva, para hacer crecer el apoyo, y dar medicamentos y lo que las mujeres necesiten”, proyectó.


KGE