Omar Reyes López, el migrante que se extravió hace casi un año en el desierto de Chihuahua y cuyo cuerpo fue localizado el pasado 17 de septiembre, regresará a su comunidad natal Santa María Amajac, en el municipio de San Salvador, Hidalgo.
El pasado 6 de octubre la Fiscalía General del Estado (FGE) de Chihuahua le notificó a la familia de Omar Que existe compatibilidad plena entre las muestras de ADN tomadas a la mamá de Omar y el cuerpo hallado en una finca abandonada en el poblado de Guadalupe Distrito Bravos, zona que forma parte del valle de Ciudad Juárez, Chihuahua.
La mamá y los tíos de Omar viajaron a Juárez para realizar los trámites que permitieron la liberación del cadáver, ayer martes.
El cuerpo fue trasladado en un vuelo comercial de Aeroméxico a la Ciudad de México, el trayecto continuó dos horas por carretera hasta Actopan y luego siguió 15 minutos hasta Santa María Amajac, donde Omar será velado unas horas y luego lo llevarán a su última morada. Después iniciará el novenario.
Los familiares de Omar informaron que esperaban el arribo del cuerpo en la madrugada de hoy miércoles y el jueves se realizará una misa de cuerpo presente en la iglesia de Santa María Amajac.
“Él estuvo extraviado mucho tiempo en el desierto, se extravió ya estando en el área de Estados Unidos y ahí pues anduvo a la deriva por varios días y prácticamente desde el 10 de noviembre del 2021 ya no se tuvo contacto con él, hasta el pasado 17 o 18 de septiembre que hubo un operativo por el área y donde finalmente lo encontraron en una finca abandonada”,dijo Belisario Reyes López tío de Omar.
Omar salió de su pueblo el 28 de octubre del año pasado, fue guiado por traficantes de personas con el objetivo de llegar a Los Ángeles, California donde viven algunos de sus parientes e iba acompañado de uno de sus primos. Ambos llegaron a Ciudad Juárez, ahí permanecieron unos días esperando para cruzar la frontera.
El 3 de noviembre Omar, su primo y otras personas iniciaron el viaje a Estados Unidos y dos días después una unidad de la Patrulla Fronteriza los detectó y se dirigió hacia ellos. Todos se dispersaron, Omar Reyes se perdió.
Él permaneció 11 meses en calidad de desaparecido. El cadaver fue hallado entre los días 17 de septiembre pasado en el poblado de Práxedis G. Guerrero, que forma parte del valle de Ciudad Juárez.
El cadaver no presentó signos de violencia, se presume que el joven -quien cumplió 20 años en diciembre pasado- murió de inanición y tras varios días de haber caminado en el desierto, señaló Belisario.
La mamá de Omar expresó que fueron 11 meses de sufrir por la ausencia de su hijo, de preguntarse si comía, si estaba bien o mal y refirió que ahora hay cierta tranquilidad para toda la familia, aunque es muy doloroso aceptar que él ha muerto.
“Mal, con el tiempo que no lo había visto estaba mal, muy mal, no podía vivir en paz, era una vida insoportable... Nos dieron la noticia de que ya lo habían encontrado y de los restos, de las pertenecías que sí eran esas que ellos nos estaban preguntando, o sea, las que habían encontrado y pues le di unas ideas y sí, sí coincidían con las pertenencias y lamentablemente sí son”, dijo Silvina Reyes.